Las negociaciones del Barça por Pogba disparan los celos en el vestuario
Los aires de estrella que gasta el francés incomodan en la plantilla
El hasta ahora presidente del Barça ha estado 'obsesionado' con el fichaje del centrocampista Paul Pogba, para enero del 2016. Una idea que ni vence, ni convence en el sí del vestuario azulgrana.
'Barto' le pidió a Ariedo Braida, el nuevo director de fútbol internacional, que hiciera lo que fuese para atar a Pogba.
Braida, perro viejo, y buen amigo del agente de Paul, Mino Raiola, y de Beppe Marotta, director general de la Juve, ha mantenido una última reunión para exponer la estrategia del Barça en el fichaje de Paul.
El gran problema son que las cifras que tiene el galo sobre la mesa de clubes como City/PSG/Madrid no bajan de los 12 millones de euros netos por temporada. Unas cantidades que se salen del marco salarial que maneja el Barcelona y que elevarían la operación por encima de los 200 millones de euros, entre traspaso, ficha del jugador y comisiones.
Si el Barça da el ok a Raiola, Paul pasaría a ser el segundo futbolista de la plantilla que más gana después de Messi, algo totalmente fuera de lugar porque un chaval de 22 años no podría superar en ingresos a futbolistas como Neymar o Suárez, que están muy pendientes de la decisión del presidente que puede abrir brecha en el vestuario y desatar las iras de estos miembros de la plantilla.
Es el caso de Nyemar que antes de salir rumbo a la Copa América puso sobre la mesa de Bartomeu ofertas de media Europa y el ejemplo del francés para forzar una mejora que firmará a su vuelta. Y Suárez espera acontecimientos con Pogba para picar a la puerta del nuevo 'presi'. Ni uno, ni otro aceptarían bajo ningún concepto que un recién llegado les pase la mano por la cara.
La operación Paul está generando caras largas en el vestuario. Es el caso de Busquets. Si el jugador de la Juventus ficha por el Barcelona no calentará banquillo, al contrario: tiene la titularidad asegurada. Una realidad que tiene con la mosca detrás de la oreja a 'Busi'.
El medio del Barça puede ser el gran perjudicado con la llegada de Paul Pogba al Camp Nou. Busquets está considerado por muchos como el mejor del mundo en su posición, hasta el punto de que en su momento desbancó a Touré Yayá obligándole a hacer las maletas para marchar al Manchester City. Es por eso, porque su rendimiento y nivel de juego no indican precisamente que necesite un relevo, por lo que el jugador de Badía no se siente nada cómodo cuando le hablan del galo.
Entiende que el Barça debe ir al mercado a buscar a los mejores, pero que el objetivo más preciado del momento sea precisamente alguien que juega en su posición no le ha hecho ninguna gracia.
Es más: desde el entorno del jugador deslizan que, de confirmarse la operación, quiere mantener una charla con técnico y club para conocer de primera mano su rol en el equipo.