La cifra del absurdo: Una recaudación del Bernabéu arreglaría el caso Ramos

Cuesta explicarse por qué en un club que ingresa al año más de quinientos millones de euros, las diferencias entre Sergio Ramos y Florentino Pérez a raíz de la renovación, extensión y mejora de su contrato están enquistadas hasta tal punto que se especule con la marcha del central sevillano. Sobre todo porque las cifras monetarias de las que se habla en todos los medios no son para nada insalvables o susceptibles de ser tachadas de 'locura', sino todo lo contrario.

Según se puede leer en la inmensa mayoría de medios, Sergio reclama entrar en el llamado 'club de los diez'. Esto es, de los jugadores de la plantilla del Real Madrid que cobran diez o más millones de euros. Las cifras varían según la fuente consultada pero lo que es seguro es que sólo dos nombres del vestuario merengue ingresan más de diez millones: Cristiano Ronaldo, que es con diferencia el futbolista mejor pagado de la plantilla y Gareth Bale. El galés está señalado como el sucesor natural del portugués a largo plazo (o a corto, según algunos) y tiene estatus y tratamiento de súper estrella, pese a llevar sólo dos temporadas en el equipo y estar lejos del luso en cuanto a números.

Ramos cobra entre cinco y medio y seis millones de euros netos por temporada, según la fuente que se consulte. Serían, pues, unos cuatro millones de diferencia con respecto a lo que él pediría pero es que, además, el Madrid tiene sobre la mesa una propuesta de renovación por un valor de 7,5 millones de euros. Son realmente entonces dos y medio los que separan a ambas partes. ¿De verdad es tan difícil que lleguen a un acuerdo?

El dato. Para que se hagan una idea, siempre que estas informaciones sean ciertas, de lo que separa realmente a Sergio Ramos de renovar por el Real Madrid, utilicemos un dato aproximado: La cifra de recaudación de un partido de fútbol en el Santiago Bernabéu, un método de ingresos que no está entre los mejores para un club planetario que factura millones de euros por imagen y publicidad. En un clásico del fútbol español pueden recaudarse hasta cuatro millones de euros, casi el doble de lo que necesitaría el Madrid para llegar a un acuerdo con el futbolista.

Orgullo. Así pues, se puede llegar a la conclusión de que el tema no se ha enquistado por dinero. Todo responde más bien a diferencias personales y de formas entre jugador y club, personificado en la figura de su presidente. Diferencias que el madridismo espera que puedan solucionarse, como se hizo antaño con hombres como Cristiano Ronaldo.