El nuevo gran Sevilla en su año de Champions corre peligro

Este jueves, el danés Michael Krohn-Deli fue presentado como nuevo futbolista del Sevilla FC para las próximas temporadas. Es el segundo fichaje del equipo sevillista tras el de Gael Kakuta, y además de servir como bienvenida para un ya conocido de la liga española, también fue una nueva oportunidad para que al director deportivo Monchi le 'acribillaran' a preguntas sobre nuevas incorporaciones, sobre todo la de Konoplyanka, y algunas dudas con futbolistas de la plantilla.

"No han decrecido nuestras posibilidades de fichar a Konoplyanka, pero marcamos unos plazos y esos se han cumplido y no se ha producido el acuerdo. A día de hoy el Sevilla ha olvidado esa posibilidad y estamos trabajando en otras opciones que pueden ser válidas. No hemos llegado a un acuerdo y damos paso a otras opciones. El Sevilla es lo suficientemente grande como para poder marcar tiempos". Esta fue la explicación de Monchi para descartar, en principio, al ucraniano. Así que podemos decir que la presentación de un nuevo jugador quedó en un acto de sabor agridulce, ya que la afición esperaba como agua de mayo a este futbolista talentoso que todavía pertenece al Dnipro.

Y es que Konoplyanka era el gran objetivo del Sevilla este verano, su fichaje estrella. No haber conseguido convencerle -recordemos que el jugador termina contrato este mes con su club- supone un primer aviso del nuevo ambiente en el que se moverá el club doble campeón europeo a partir de ahora. Su caché en Europa como entidad ha subido muchísimo en los dos últimos años y por eso, algunas contrataciones se harán más fáciles pero muchas otras no tanto, debido a que los jugadores y sus agentes pedirán más dinero a la hora de firmar.

Por contra, los jugadores destacados de la plantilla andaluza siguen bajo dudas. Eso es algo que siempre o casi siempre le ha pasado al Sevilla, pero la situación difiere en tanto en cuanto ahora los hispalenses deben retener a sus piezas clave para afrontar retos mayores, como la Champions. En este punto podemos hablar del colombiano Carlos Bacca, delantero pretendido por varios clubes de la Premier y la Serie A italiana. Por mucho que el Sevilla se empeñe en retenerle, podría acabar perdiéndolo y afrontando la necesidad de fichar otro ariete de nivel similar. Y volverían a pedirle mucho dinero.

Ambiente parecido al de Madrid o Barça. El Sevilla empieza, pues, a ver cómo su situación se parece cada vez más a la de los gigantes de la liga, siempre tan atareados por sus dificultades para fichar en cada mercado estival. Por el contrario se han ido ya Iago Aspas (Celta) y Fernando Navarro y Arribas (Deportivo de la Coruña). Gerard Deulofeu tiene pie y medio en el Everton inglés y se ha rescindido el contrato de Manu del Moral, Cicinho y Babá, por lo que hablamos de seis bajas por sólo dos fichajes, ambos de hombres teóricamente asequibles.

Al Sevilla le urge ponerse las pilas, a pesar de que Monchi reclame tranquilidad y también empezar a pensar qué hará si se le marcha alguno de sus hombres más importantes. El director deportivo confirmó que Denis Suárez se quedará sí o sí otro año a pesar de los pensamientos del Barça de repescarle, y parece que el único que está atado y bien al Pizjuán es Unai Emery. Los gages del oficio de ser campeón.