El nuevo Barça 2018-2019 ya tiene el visto bueno de Messi (y esconde una sorpresa galáctica)

Poco a poco, vamos viendo bien perfilada y casi finiquitada la nueva plantilla del Barcelona 2018-2019. Un equipo que volverá a girar, por supuesto, en torno a Leo Messi, pero que ha sabido moverse en un mercado complicado y adelantarse a sus principales rivales -sobre todo al Real Madrid- a la hora de acometer los fichajes que requería el plantel azulgrana. Toda una declaración de intenciones por parte de un equipo cuyo principal objetivo esta temporada va a ser centrarse en Europa, y en destronar a los blancos del cetro Continental, que lleva en su poder ya tres campañas consecutivas.

Era necesario reforzar ciertas posiciones concretas, y así ha sido. Se marchó Andrés Iniesta, y al ya realizado fichaje de Philippe Coutinho hace algunos meses, su verdadero sustituto, el Barça le ha añadido el de Arthur. Un futbolista cuya llegada conlleva algo más de riesgo por su falta de experiencia y recorrido, pero que pretende ser un refuerzo de futuro. No son pocos los expertos que aseguran que Arthur tiene "cosas" de futbolistas como Xavi Hernández o el propio Andrés, algo que veremos con el tiempo.

Junto al carioca, el Barcelona tardó poco en acelerar para cerrar la contratación de Lenglet. Un central de mucho futuro, por el que pujaban ya varios grandes equipos de Europa. Y que permite la más que posible salida de Vermaelen, y un trío de zagueros de primer nivel mundial, junto a los ya consumados Piqué y Umtiti.

Faltan algunas piezas todavía para cerrar el rompecabezas, pero el Barça tiene bien claros los puestos que conviene terminar de reforzar con más urgencia. Uno de ellos, el lateral derecho, donde Semedo no terminó de convencer la pasada temporada y Sergi Roberto y Aleix Vidal se siguen viendo más como parches que como soluciones a largo plazo; y veremos qué se hace con el centro del campo, en donde, tras la marcha de Paulinho, cabría incluso un fichaje más. Las miradas apuntan a Rabiot, un jugador de mucho talento que sería presentado como un bombazo de última hora y hasta cierto punto inesperado. Todas, llegadas que Messi ve con buenos ojos. Se está conformando un plantel para competir por todo contra el Real Madrid la próxima temporada. Y más, cuando en las filas merengues ya no está Cristiano Ronaldo.