Messi se carga un fichaje estrella del Barça (y acelera las negociaciones con el Real Madrid)
El lío interno en el Camp Nou
Leo Messi no quiere más gallos en el gallinero. Luis Suárez no soportaba la idea de que Antoine Griezmann vistiera de azulgrana, al punto de mandar avisos a las alturas con el apoyo del argentino.
Las misivas llegaron alto y claro a un Griezmann que, por todo, prefirió no arriesgar con el Barça y seguir en el Atlético.
Una realidad a la que, cuentan desde dentro, acaba de sumarse otra.
Eden Hazard no contaba, ni cuenta, con el ‘cariño’ de los jefes del vestuario.
Messi no quiere jugadores en su zona de influencia y prefiere activos de perfil bajo en lo mediático en el ataque.
La experiencia con Neymar, en este sentido, no fue la mejor, y Hazard era y es un futbolistas con pedigrí.
La elección de Malcom, un futbolista del montón sin pretensiones, igual que en el caso de Willian -primera opción-, no es casual.
El tridente azulgrana -Messi, Suárez y Coutinho- se siente más cómodo con jugadores que vengan a servir y no a servirse.