Análisis DB: Cómo el Real Madrid ha podido tirar media Liga a estas alturas

La derrota en San Mamés escuece y mucho. No tanto por el resultado sino también por el juego mostrado. Y lo que es peor, la impotencia evidente. Al Real Madrid nunca se le vio capaz de darle la vuelta al marcador. Tan sólo de conseguir el empate en alguna jugada con cierta fortuna, como el disparo desde cuarenta metros de Bale que dio en el poste. Muy poco bagaje para un equipo que aspira a ser campeón de Europa y de España.

En apenas ocho semanas el equipo ha pasado de ser la envidia del campeonato, todopoderoso en su juego y eficaz en su ataque a todo lo contrario. Ha visto como la ventaja conseguida ante sus eternos rivales se ha esfumado en pocos partidos, y deja ver una serie de problemas, físicos entre otros, que ya preocupa y mucho a los directivos del palco.

Ancelotti sigue tranquilo. Confiado. Cree saber donde están los problemas y cree tener la soluciones. No va a ser fácil. Ya sabemos cómo se las gasta este vestuario y entorno cuando los resultados no acompañan. Analicemos algunas claves:

Pérdida del liderato antes del clásico.

El 25 de octubre de 2014 el Real Madrid vencía al Barcelona en el Bernabéu. Se hacía con el liderato y daba la vuelta a una tendencia. Ahora se presentarán el próximo 22 de marzo casi con toda seguridad en el Camp Nou ante un Barcelona líder. Si los de Ancelotti pierden, casi podrán despedirse con total seguridad del campeonato, ya que cuatro puntos a estas alturas son prácticamente insalvables. Además, si los de Luis Enrique vencen por más de dos goles de diferencia tendrán el gol average a su favor.

No han sabido aprovechar la crisis azulgrana.

El Barcelona tocó fondo en Anoeta en la jornada 17. Ni ese momento supo aprovechar ya que en esa misma jornada los blancos no supieron derrotar al Valencia que les podría haber supuesto una buena brecha en la clasificación. Tras la derrota del Barcelona ante el Málaga llegaron los cuatro puntos, pero el empate con el Villarreal y esta derrota han propiciado la pérdida de la ventaja. Los de Luis Enrique han conseguido sobreponerse a su crisis de juego y resultados. Incluso Messi, que pasó por semanas de bajón de juego y crispación en el vestuario, vuelve a ser el que era, muy por encima de Ronaldo en este momento.

La BBC está desaparecida.

Han dejado de emitir. Sin frecuencia. Con la polvora mojada. Benzema, Bale y Cristiano están desaparecidos sobre el terreno de juego. El portugués desde que recibió el Balón de Oro no ha vuelto. Lo intenta, pone voluntad, pero nada. Bale ya no corre como antes, y Benzema no caza ni una en el área. Es como si se hubiera desconfigurado. Sin ellos, el Real Madrid pasa a ser un equipo vulgar.

Demasiado debates abiertos.

El tema de la portería, siempre cuestionada desde la época de Mourinho. El centro del campo, ahora que parecía que Isco y Kroos se habían hecho con el mando. Los problemas de lesiones en la defensa, Ramos, Varane, Marcelo. Las fiestas nocturnas de algunos jugadores, que han hecho mucho daño en el entorno. Demasiadas cuestiones internas, demasiados debates abiertos.

Se relajaron tras ser campeones del mundo.

El día que Ronaldo fue expulsado en Córdoba en aquel acto de impotencia y prepotencia señalaba su escudo de campeón del mundo de clubes cuando cogía el camino del vestuario. Lo cierto es que desde ese título los de Ancelotti se han relajado. Bajón físico y mental. Once puntos desde entonces se ha dejado el equipo, ante Valencia, Atlético, Villarreal y Athletic. Demasiado para aspirar a esta Liga. Y no sólo eso. Cinco puntos ha perdido este equipo en partidos que han empezado ganando. Ante Valencia y Villarreal marcaron primero, pero de nada les sirvió. No supieron interpretar el partido y el resultado.

Mal inicio de temporada.

Han pasado varios meses pero aquellos puntos son los que se echan de menos ahora. Ante Real Sociedad en Anoeta, con el Atlético de Madrid en el Bernabéu. Los entrenadores saben que la liga se juega desde la primera jornada, y los blancos se dejaron entonces demasiados puntos en el camino.

Más derrotas que la temporada pasada.

El Real Madrid cosechó en San Mamés su séptima derrota oficial de la temporada. Una más, y todavía queda mucho que en toda la temporada pasada. Cuatro de esas derrotas han llegado tras la impecable racha de 22 triunfos consecutivos. Desde entonces, ocho victorias, dos empates y cuatro derrotas.

El Real Madrid tendrá de nuevo la ocasión de darle la vuelta a la situación en el Camp Nou, pero lo tendrá muy complicado. Allí le esperará un Barcelona en su mejor momento de juego y resultados, oliendo a sangre en el rival, y queriendo conseguir una de esas humillaciones que pasan a la historia de los enfrentamientos entre ambos. Ancelotti tiene mucho trabajo por delante. Pero él también se jugará mucho en ese partido. Quizás su continuidad la próxima temporada.