Casillas no se irá del Real Madrid como su amigo Xavi se fue del Barça
Ya le ha dicho que sí al Oporto, pero también ha advertido que sólo irá a Portugal teniendo la seguridad de que va a cobrar hasta el último euro firmado con el Madrid.
El Oporto quiere a Iker Casillas y a Casillas le gusta el Oporto. Están condenados a entenderse. A Sara Carbonero le hubiera gustado más Londres o París, pero la proximidad de Oporto con Madrid ha ayudado a la pareja Casillas-Carbonero a decantarse por la oferta portuguesa y acabar con el martirio que él está viviendo en el Bernabéu en los últimos años.
Casillas ha dado su OK, pero con una condición. Quiere cobrar íntegramente las cantidades que tiene firmadas con el Real Madris para los dos próximos años. Le da igual quién se lo pague. Pero lo quiere cobrar. Le hubiera gustado ingresar un finiquito generoso por los servicios prestados, como ha disfrutado su amigo Xavi en su salida del Barcelona, pero no podrá ser. Ahora se trata de que Real Madrid y Oporto se pongan de acuerdo en el pago de su ficha, que es de siete millones la temporada próxima y siete millones y medio netos la siguiente. El Oporto ya ha avanzado que no puede pasar de cuatro, por lo que el Real Madrid debería añadir los 6,5 millones y medio que faltarían para llegar a los 14,5 que Iker tiene firmados con el club blanco para las dos próximas temporadas.
El Real Madrid le prometió hace unas semanas a Casillas que le ayudaría a salir del Bernabéu asumiendo que estaba dispuesto a aportar la diferencia económica que hubiera entre las ofertas que pudiera recibir y lo que tenía prometido en el Madrid de seguir en la disciplina blanca. Ahora Casillas espera a que el club cumpla su palabra y pueda percibir íntegro el contrato que en su momento firmó con Florentino Pérez.