El Barça marca el precio de salida a uno de los referentes del equipo

Pedro no está bien. El canterano ha pasado de disputar finales a jugar encuentros de medio pelo con minutos contados y en encuentros ya ganados. Aún así, el canario está aprovechando las oportunidades que le da Luis Enrique, pero no es suficiente. Los 81 millones de Suárez pesan demasiado en la psique del asturiano que tiene claro quien va primero y quien después. Es por ello que Pedro  ha dado la orden a sus representantes de escuchar ofertas. Una realidad que el entorno del interesado ya habría comunicado al club.

El Barcelona, por su parte, amenazado por la sanción FIFA, es consciente que el rol del futbolista en este Barça no es el deseado por nadie y entiende que retener al jugador será más que complicado. Pedrito no está a gusto en un Barcelona en el que Messi, Neymar y, muy especialmente, Suárez, le van a cerrar el paso a medio plazo. Además, el canterano, que se acerca a la treintena estaría por la labor de firmar un último gran contrato que mejorara su situación en el Barça en protagonismo y ficha. Es por ello que desde el Barcelona no se quiere forzar la continuidad de un jugador al que el club tasará en un mínimo de 30 millones de eruos. Esa es la cifra que equipos como Arsenal, Liverpool o Manchester United tendrán que desembolsar si quieren que Pedrito vista sus colores la próxima temporada. Por debajo de esos números no habrá negociación.

Y es que el Barça, que preferiría mantener al futbolista al no poder fichar hasta 2016, no va a regalar a un activo con contrato hasta el 30 de junio de 2016 y una cláusula de150 millones de euros. Pedro su parte tiene tres caminos a seguir: esperar para marcharse con la carta de libertad y pasar otro año casi en blanco, forzar un traspaso o aceptar una renovación que le dejaría a la sombra del tridente azulgrana hasta el final. La segunda vía apunta a ganadora.