Cristiano Ronaldo desafía al binomio Benítez-Gareth Bale en Australia

El luso hace trabajo específico para estar a tope desde los primeros partidos de pretemporada

Cristiano Ronaldo desafía al binomio Benítez-Gareth Bale en Australia

El primer encuentro del Real Madrid de la era 'Rafa Benítez' no dejó excesivas alegrías para la parroquia blanca. Los cánones de pretemporada y los discursos oficiales y oficiosos típicos de los días en los que nos encontramos obligan a técnicos y jugadores a entonar el discurso de la paciencia, que por otro lado no deja de ser bastante cierto a pesar de ser tópico. "Llevamos sólo cinco días de trabajo", se apresuraba a afirmar Benítez, consciente de que los tiempos que corren por el club le obligan a conquistar a la directiva y la afición de forma más rápida que de costumbre debido al fracaso de la última temporada.

 

El nuevo entrenador también debe empezar a convencer a todos con sus decisiones tácticas. Y tratándose de Rafa Benítez es seguro que provocará muchísimas preguntas en este aspecto, pues es sabido que al madrileño le gustan las rotaciones, las variaciones de sistemas y la búsqueda de diferentes soluciones durante los encuentros. Sin ir más lejos ante la Roma vimos un Madrid que atacaba en estático con 4-2-3-1 y que defendía replegado en 4-4-2, con una versión del equipo algo más sólida pero sacrificando magia arriba y con un juego algo más directo.

 

En este sentido, empieza a vislumbrarse la intención de club de darle galones a Gareth Bale. 90 minutos ante el conjunto italiano bastaron para comprobar que el galés abandonará la banda derecha que ha ocupado en sus primeras dos temporadas como madridista para jugar donde a él más le gusta, de mediapunta por el centro o tirado a la izquierda por momentos. Ahí es donde juega con Gales pero ahí es donde casi nunca había jugado en el Real Madrid porque ese es el espacio de Cristiano Ronaldo.

 

El portugués parece haberse tomado el mensaje muy en serio. Paralelamente a las informaciones que hablan de un enfado por su parte al ver cómo el club otorga más libertades a Bale, se ha puesto las pilas en los entrenamientos para alcanzar un estado de forma del que parece estar aún algo lejos, visto lo visto el sábado. No jugó excesivamente bien y no quiere que se siga especulando con sus prestaciones físicas una vez superada la treintena.

 

No sólo Messi. Parece que el argentino no será la única motivación que hará que CR7 luche contra sí mismo y sus registros esta temporada. A Cristiano le toca volver a callar bocas y también tendrá que demostrar que Gareth Bale aún no está llamado a quitarle de en medio en cuanto a protagonismo en este Real Madrid. De esto debe beneficiarse el equipo. Ahora bien, las consecuencias en el once inicial al desplazarse el galés al centro las iremos viendo con el paso de los partidos.