Rafa Benítez encuentra a sus 'chivatos' en el vestuario del Real Madrid

Hartos. Así está una amplia mayoría del vestuario del Real Madrid ante los gestos, aspavientos, niñerías/egoísmo de Cristiano Ronaldo en el campo el pasado curso que no obtuvieron ningún tipo de reprimenda por parte de un Ancelotti incapaz de enfrentarse al estatus del poder de Sergio Ramos, el propio Ronaldo y Casillas.

Florentino Pérez quería y quiere limpiar la plantilla de egos/privilegios adquiridos con Carlo y encomendó a Rafa ejercer el mando con mano dura desde el inicio. Y Rafa ha marcado perfil. Una actitud que ha molestado a los grandes tótems que ven como los nuevos postulados rompen su estatus de intocables.

Una realidad que ha provocado que el sector más crítico no ha haya dudado en aprovechar la llegada de Rafa para tirar de la manta: Benítez ha mantenido reuniones con miembros de la plantilla desde su nombramiento en las que se han deslizado los favoritismos del pasado. Los privilegios que futbolistas como Cristiano, Marcelo, Pepe, Ramos, Casillas o James Rodríguez disfrutaron con Ancelotti. Privilegios de fondo y forma en el día a día, y en cuestiones de índole personal, que han generado roces en la plantilla y pasado factura en la unión del vestuario.

Futbolistas como Arbeloa, Illarramendi, Keylor Navas o Bale y, en menor mediada, Isco, Kroos y Modric dibujaron a Rafa un vestuario con jugadores de primer, segundo y hasta un tercer nivel con Carletto al mando que provocó un distanciamiento excesivo de un grupo fragmentado en clanes. Unas diferencias que, en algunos casos, se trasladaron al terreno de juego lastrando al equipo.