Edurne se cuela en las conversaciones para sacar a De Gea del United
Las dificultades por las que atraviesa la pareja se dibujan como la gran baza para decantar la balanza
Florentino Pérez es un maestro en lo suyo. El presidente del Real Madrid le ha puesto sobre la mesa el 8+2 a Sergio Ramos para retener al futbolista en el club blanco. El clan, con la palabra dada el United, ha pedido esperar a su regreso a Madrid para decantar la balanza en uno u otro extremo: a Sergio le frena el temor a la represalia del Bernabéu tras haber quedad en evidencia que lo que se corría por los mentideros de Madrid no era un embuste: su continuidad en el Real era cuestión de dinero.
Una jugada que ha desquiciado a los ejecutivos de Old Trafford que ya estampaban el nombre de Ramos en la nueva elástica y que puede poner la guinda al pastel con De Gea: el Madrid se planta en los 25 millones de euros por el ex del Atlético y marca el camino con el ejemplo de Sergio. El club blanco no tiene prisa, las portería está aparentemente cubierta y el próximo año David saldrá a coste cero. Además, Pérez conoce muy bien lo se cuece en Manchester.
De Gea no se enfrentará a Van Gaal y compañía pero su cara es un poema: Edurne, su pareja, tiene al club contra las cuerdas con la vuelta a España sí o sí. La cantante no quiere pasar un año más entre Madrid y Manchester. La relación se resiente. Y el United puede terminar cargando con un problema de pareja si no le abre la puerta. Una realidad que terminaría de 'matar' a un David superado por la situación.