Es la estrella de la Bundesliga tiene 16 años ¡Y no va a poder jugar!
Los aficionados no se lo creen ¡Respuesta!
Ni Luka Jovic ni siquiera Erling Haaland. Tampoco Jadon Sancho. No, la estrella indiscutible de la Bundesliga, el menos en Frankfurt, es menos conocido por su nombre, Attila, que por sus apariciones públicas, de una majestad impresionante. Y solo tiene 16 años. Pues bien, los hinchas del Eintracht de Frankfurt, ex equipo del delantero serbio del Real Madrid, están indignados con la decisión del club y de la liga de impedir que juegue los próximos compromisos de su equipo.
Y es que durante los partidos como local del equipo de la Alemania central, junto al río Meno, ha sido una constante apoyarse en el que es su auténtico baluarte y símbolo antes de los choques, pero debido a la cancelación temporal de algunos puestos de trabajo y grupos de riesgo por el Covid-19 su gran estandarte no podrá estar junto a sus jugadores cuando se reanude la competición, lo que es una sorpresa negativa para el cuadro germano.
El Eintracht Frankfurt se ve las caras en la vuelta a la normalidad de la competición bávara ante el Borussia Mönchengladbach a las 18.30 del próximo sábado 16 de mayo, sin embargo el Rey del Aire, como se le denomina en el Commerzbank-Arena, no estará como suele hacerlo antes de los partidos. Esta enorme águila real, que forma parte, según dice el club, de ellos mismos, suele volar alrededor del coliseo alemán, con capacidad para 51.000 espectadores, antes de cada duelo, infundiendo ánimo a su equipo, pero el coronavirus le impedirá cumplir con la tradición.
Su propietario, Norbert Lawitschka, de 66 años, vive junto a ella en Gelnhausen, pero es grupo de riesgo, ya que es diabético, y no podrá acercarse con el animal a la cancha del Eintracht. Los hinchas celebraron hace poco el 16 cumpleaños de su estrella, Attila, enviándole números regalos. Lawitschka ha advertido que la rapaz está algo triste, ya que está acostumbrada al contacto humano, y este alejamiento y soledad posiblemente le hayan afectado.
La Bundesliga arranca, sí, pero está incompleta ya que a la pérdida de público se une la carencia de estandartes.