El Barça se plantea su fichaje: si sigue así, se queda en Manchester
Rashford no saca al Barça de ningún apuro
El FC Barcelona comienza a dudar seriamente sobre la idoneidad del fichaje de Marcus Rashford, un nombre que sonó con fuerza en los despachos azulgranas como posible refuerzo ofensivo. El delantero inglés no está cumpliendo cuando más se le necesita, y su rendimiento actual en el Manchester United genera más dudas que ilusión dentro del club catalán.
Un jugador que no aparece cuando las cosas van mal
El problema con Rashford no es solo su falta de gol, sino su incapacidad para aparecer en los momentos difíciles. Cuando el equipo necesita liderazgo, reacción o determinación, el inglés se apaga. Es un jugador que acompaña, que brilla cuando el colectivo funciona, pero que desaparece cuando las cosas se tuercen. En el Barça preocupa precisamente eso: que su perfil no encaje con la exigencia del Camp Nou, donde los grandes deben responder incluso en la adversidad.
Su último partido en el Santiago Bernabéu volvió a evidenciar esas carencias. Desaparecido durante largos tramos, sin desborde ni determinación, Rashford pasó inadvertido ante un rival que le exigía su mejor versión. Lejos de ser un factor diferencial, se mostró como un jugador sin alma ni impacto, incapaz de cambiar el rumbo del encuentro cuando las cosas no van bien y necesitan un aporta diferencial como el que pueda dar Rashford.
El Barça tiene serias dudas
En el Barça, las comparaciones son inevitables. Se busca un delantero que marque diferencias, que imponga respeto y que rinda bajo presión. Sin embargo, lo que se está viendo de Rashford en Inglaterra está muy lejos de eso. El cuerpo técnico y la dirección deportiva observan con escepticismo su evolución y temen que su irregularidad se mantenga si llega a vestir de azulgrana.
La realidad es que, si sigue en esta línea, el Barça no moverá ficha. Los informes internos son claros: su aportación actual no justifica una inversión importante. Marcus Rashford está obligado a reaccionar si quiere que el interés del club catalán siga vivo. Así pues, si su nivel no mejora pronto, se quedará en Manchester, viendo cómo el tren del Barça pasa de largo.