El tapado en la agenda de Joan Laporta y Deco no espera al Barça y elige al Chelsea

Joan Laporta y Deco tenían un tapado en la agenda para reforzar el ataque, en caso de que las contrataciones de Marcus Rashford, de Luis Díaz o de Nico Williams se acabaran tambaleando. Y tras conocerse que el crack del Athletic Club está muy cerca de convertirse en el próximo fichaje del Barça, después del acuerdo alcanzado, finalmente Jamie Bynoe-Gittens ha tomado la decisión de no esperar más a que le llegue la oferta.

Así que acabará recalando en las filas del Chelsea, que es el equipo que en este momento tiene la delantera y cuenta con más opciones de acabar llevándose el gato al agua. Es cierto que ha bajado sus prestaciones en comparación con los primeros meses de la campaña, y ha dejado de ser titular indiscutible en el Borussia Dortmund, viéndose claramente perjudicado por el desembarco de Niko Kovač en el banquillo, pero sigue siendo considerado como un futbolista muy atractivo e interesante.

Tiene un regate eléctrico, una velocidad endiablada y un margen de mejora por delante que le han llevado a ser designado como uno de los extremos con más futuro del continente, a sus apenas 20 años. Y esto había llamado la atención de los ojeadores de las grandes escuadras del continente, y en el Spotify Camp Nou no le quitaban el ojo de encima desde que irrumpió con fuerza en la élite, siendo apenas un simple adolescente y sin experiencia. 

Pero el Barça en todo momento ha priorizado otras alternativas para la delantera, considerando que el precio de Bynoe-Gittens tampoco era precisamente reducido, y los aurinegros estaban solicitando una indemnización económica cercana a los 60 millones de euros, es decir, prácticamente lo mismo que cuesta sacar a Williams JR de San Mamés. Un factor que ha provocado que Laporta y Deco se acaben por olvidar completamente de él. 

Y han dejado el camino despejado de obstáculos para Todd Boehly, que convertirá al canterano del Manchester City en uno de los primeros refuerzos galácticos que aterricen en Stamford Bridge este verano, y se pongan a disposición de Enzo Maresca. Eso sí, seguro que no le quitarán el ojo de encima.