Hansi Flick se declara culpable, bloqueó el fichaje y ahora el Barça juega con diez
El rendimiento de Jules Koundé está siendo un desastre
A pesar de la trabajada victoria contra el Girona, el Barça no se lleva sensaciones nada positivas del duelo ante el conjunto de Míchel. Los de Hansi Flick volvieron a poner en escena un juego más que deficiente en el que el orden y la coherencia brillaron por su ausencia. Hubo muchas pérdidas de balón en zonas delicadas y la atención defensiva, como ya viene siendo habitual, estaba en todos lados menos en el terreno de juego, donde la espalda de la zaga culé era un auténtico coladero. Lo que dejó unas sensaciones que ni la victoria en el último minuto pudo llegar a enmascarar.
En este sentido, uno de los nombres propios, para mal, del partido, fue el de Jules Koundé. El lateral francés mostró, de nuevo, que no tiene la mente puesta completamente en lo que pasa sobre el terreno de juego. Se desconoce si hay algún motivo detrás de las múltiples desconexiones del galo. Pero lo que sí es absolutamente cierto es que en los últimos partidos, que juegue Koundé implica que el Barça tenga un jugador menos sobre el césped.
El fichaje de Dumfries lo arreglaba todo
La realidad es que esta falta de rendimiento en el lateral diestro hubiera podido tener una muy sencilla solución. En verano, Deco le ofreció a Hansi Flick la posibilidad de fichar a Denzel Dumfries, uno de los mejores carrileros del mundo en el aspecto defensivo, a cambio de 25 millones de euros. Era una oportunidad única, pero, confiando en Koundé, Flick desechó la oportunidad, alegando que con el galo ya iba bien. Un plan que ha resultado ser completamente fallido.
Y es que ahora, con Jules Koundé pasando por un pronunciado valle de rendimiento, contar con otro lateral de nivel top mundial hubiera sido una solución más que válida. Sin embargo, ahora, con Eric asentado como un central imprescindible para el equipo, Koundé se presenta como la única opción en la banda derecha de la defensa culé. Un problemón si sigue jugando tan mal.
Así pues, Flick asume el error y va a tener que solucionarlo, encontrando la mejor versión de un Koundé que, si es capaz de estar al nivel del año pasado, no va a provocar ningún problema. Eso sí, está muy lejos de ese nivel.