Luis de la Fuente está teniendo problemas con Lamine Yamal en la Roja
La actitud infantil del extremo catalán en algunas ocasiones mosquea al seleccionador español
Además de ser uno de los jugadores más importantes del FC Barcelona, Lamine Yamal también es una pieza clave en la selección española. A pesar de solo tener 17 años, el extremo catalán ya se ha hecho un hueco en el combinado nacional y su gran Eurocopa ayudó a la Roja a llevarse el título el pasado verano. Aun así, a Luis de la Fuente no le acaba de convencer del todo la actitud del azulgrana.
El seleccionador ve como está empezando a tener problemas con el comportamiento un tanto infantil del delantero, ya que aún no tiene la mayoría de edad y su carácter, al ser tan joven, no acaba de gustar entre los más veteranos y en el entrenador. Lamine siempre está de broma en los entrenamientos con sus compañeros y parece como si no se tomara en serio todo el trabajo estipulado.
Luis de la Fuente le pide más seriedad a Lamine Yamal
Por eso, hay ocasiones en los que esa actitud del catalán inoportuna a Luis de la Fuente, y ya le ha pedido en múltiples ocasiones que sepa separar entre los momentos de broma y los de trabajo serio que hay que hacer en los entrenamientos y en la preparación de los partidos. Aunque Lamine Yamal lo ha entendido y le ha pedido perdón al seleccionador, su juventud hace que vuelva a repetirse.

Aun así, el técnico español no está preocupado, ya que sabe que todos estos problemas son cosas de la edad y que el futbolista madurara dentro de poco, teniendo en cuenta que aún no ha cumplido los 18 años y que tiene toda la carrera por delante. El riojano tiene claro que el jugador azulgrana será una pieza indispensable para la selección en los próximos años y habrá que cuidarle bien.
Algunos creen que su actitud no cambiará
Por otra parte, hay voces que piensan que la actitud de Lamine es la ideal, ya que está relacionándose con sus amigos, tanto en el Barça como en la selección, y que eso le ayuda a divertirse más en el terreno de juego. Creen que el comportamiento del futbolista no cambiará, porque él es así y le gusta divertirse jugando a fútbol.