Era la gran promesa del Barça, como Lamine Yamal, y pide ayuda a Neymar porque no tiene equipo

La Masía ha sido siempre una fábrica de talentos, aunque ahora vive una etapa dorada. Porque no se recordaba nada igual desde la irrupción de Leo Messi, Víctor Valdés, Andrés Iniesta, Sergio Busquets, Pedro Rodríguez o Xavi Hernández, si bien todavía queda un largo camino por recorrer para los Alejandro Balde, Pau Cubarsí, Gavi o Lamine Yamal. Aun y así, en el Barça se permiten el lujo de soñar en grande con sus joyas. 

Pero tampoco se puede poner toda la presión sobre chicos tan jóvenes, ya que encontramos muchos casos de futbolistas que nunca llegaron a explotar todo su potencial y se quedaron en el intento, y siendo recordados como ‘juguetes rotos’. Ansu Fati es el último ejemplo de ello, pero echando la vista hacia atrás también nos podemos encontrar con casos como el de Bojan Krkic, que se acabó retirando del fútbol profesional con poco más de 30 años.

Y otro diamante en bruto que estaba destinado a triunfar y que nunca pudo acabar de cumplir con las enormes expectativas fue Rafinha Alcántara. Mucha gente afirmaba que era incluso mejor que su hermano mayor, Thiago, y llegó a consolidarse en el primer equipo de la mano de Luis Enrique, quien ya lo había tenido a sus órdenes durante el año que estuvo a préstamo por el Celta de Vigo, y confiaba plenamente en sus habilidades técnicas.

Aunque obviamente nunca pudo ser titular indiscutible por la feroz competencia que existía en sus planes, sí fue un recambio muy valioso, hasta que una grave lesión de rodilla frustró su progresión. Nunca más volvió a ser el mismo, y pasó por el Inter de Milán, el Paris Saint-Germain, la Real Sociedad o el Al-Arabi qatarí, para tratar de recuperar la sonrisa, pero sin éxito. Y desde el pasado mes de julio se encuentra sin trabajo.

Por suerte, el internacional brasileño puede recalar próximamente en el Santos, uno de los conjuntos más emblemáticos de su país, y donde volvería a compartir vestuario con Neymar, con el que ya coincidió en el Barça.

Rafinha ha pedido ayuda a su antiguo compañero, y puede incorporarse con efecto inmediato al cuadro paulista, que acaba de ascender a primera división.