El caso contrario a Marcos Llorente: el ex del Madrid que no arranca

Un descarte de Zinedine Zidane no arranca

El caso contrario a Marcos Llorente: el ex del Madrid que no arranca

Marcos Llorente ya es un error histórico en el Real Madrid, y puede ser considerado como una de las peores decisiones que ha tomado Zinedine Zidane. No creyó en él en ningún momento, y no le dio minutos, pues no confiaba en sus cualidades, y tenía problemas personales. Por eso, permitió su traspaso al Atlético de Madrid de Diego Pablo Simeone, ya que no pensaba que fuera a convertirse en la estrella mundial que es a día de hoy.

Un error muy grave, casi, imperdonable. Porque fue llegar al conjunto colchonero, y convertirse en otro futbolista, que nada tiene que ver con lo que ofreció en el cuadro blanco, ni tampoco, en su cesión al Deportivo Alavés. Es cierto que su adaptación no fue nada sencilla, y tuvo que tener mucha paciencia, pero han acabado recogiendo los frutos. Y es que se ha convertido en una de las grandes estrellas del equipo, y uno de los cracks más determinantes.

Está a la altura de Jan Oblak y Luis Suárez en cuanto a importancia, como demuestran sus cifras. Le firmaron para ser el relevo de Rodrigo Hernández, que se había ido al Manchester City de Pep Guardiola, pero es más adelantado donde ha estado a su 100%. Ha actuado como interior, como segundo punta, como carrilero o como lateral derecho, y siempre, haciendo grandes actuaciones. Físicamente tiene un poderío brutal, y técnicamente no se queda atrás.

Su llegada al área rival le convierte en una de las piezas más peligrosas que hay en el Wanda Metropolitano, sin duda. 10 goles y nueve asistencias acumula entre todas las competiciones, siendo ya un fijo en las convocatorias de Luis Enrique para la selección española. En cambio, a Oscar Rodríguez no le ha ido tan bien la vida desde que salió del Santiago Bernabéu, firmando por el Sevilla de Julen Lopetegui. Llegó con grandes expectativas, después de sus dos años sobresalientes en el Leganés, debutando con ‘la Roja’, incluso.

Pero no se ha ganado la confianza de Julen Lopetegui, y ha jugado más bien poco. 854 minutos en 23 partidos es su bagaje, viendo puerta en dos ocasiones, y repartiendo otras dos asistencias.

El Madrid ya ni le observa.