Florentino acerca un crack de futuro al Real Madrid por 17 millones
El presidente merengue da un paso de gigante en la negociación
Las últimas semanas han estado marcadas en el Real Madrid en torno a los posibles fichajes de Antonio Rüdiger y Kylian Mbappé en 2022, dos futbolistas que acaban contrato en junio y que se han dejado querer por la casa blanca en más de una ocasión. No obstante, aunque el francés y el alemán están acaparando la gran parte de la atención en Chamartín, hay otro jugador que podría dar la campanada y sumarse a la lista de fichajes que sopesa realizar el club entre el mercado invernal y el veraniego de 2022: Arsen Zakharyan.
El diario ruso Championat ha desvelado recientemente que el Real Madrid ha mostrado interés en la joven perla del Dinamo de Moscú, la cual está acumulando clubes de primer nivel tras sus pasos gracias a las buenas prestaciones ofrecidas en los últimos meses. Zakharyan es un centrocampista de 18 años que dio el salto a la primera categoría del fútbol ruso en el mercado invernal de 2021, donde está cuajando un excelente rendimiento y donde ya ha llamado la atención de los blancos con vistas al futuro del proyecto que se está gestando en Concha Espina.
Florentino y Ancelotti son conscientes de que Toni Kroos y Luka Modric ya cuentan con una edad que precisa un recambio generacional en la parcela creativa y, aunque Fede Valverde y Eduardo Camavinga bien podrían cumplir con ese cometido, el presidente no quiere desaprovechar la oportunidad de hacerse con uno de los futbolistas más prometedores de Europa en su posición.
Para más inri, hay una razón de peso por la que Florentino ha fijado sus ojos en Zakharyan: su fichaje podría encarrilarse gracias a la presencia de Pedja Mijatovic en la operación, quien según han afirmado varios medios es el hombre que encabeza la comitiva blanca en el fichaje del ruso.
Eso sí, el plan del Real Madrid pasa por cerrar dicha incorporación, que podría sellarse a cambio de 17 millones, para que el jugador llegue a Chamartín en enero... pero para incorporarse al filial blanco y, en un futuro no muy lejano, dar ese salto a primera escena si cumple con las expectativas depositadas.