Florentino lo sabe: el crédito de Zidane se agota

Florentino lo sabe: el crédito de Zidane se agota

Una derrota del Madrid en Sevilla supondría cambios en el equipo blanco

El crédito de Zidane esta en horas bajas en las oficinas de Concha Espina. El técnico galo, fichado en el mes de marzo para reflotar el transatlántico blanco y anunciado como el salvador tras las tres Champions ganadas entre los años 2014 y 2016 está viviendo sus momentos más duros desde que es entrenador madridista.

El pasado miércoles, con la derrota en Champions frente a un Paris Saint Germain mermado y con sus figuras en el dique seco, ha hecho saltar las alarmas en la directiva merengue. El mal final de liga no hizo mella en la confianza de Florentino Perez y Jose Ángel Sánchez de cara a la nueva temporada pero desde luego no ayudo a agrandar el crédito del francés. Sin embargo, una pretemporada donde se han visto de manera reiterada los fallos ya cometidos en la pasada temporada con los tres técnicos (Julen Lopetegui, Solari y el propio Zizou) y las mismas carencias que ya se hicieron palpables durante todo el curso pasado unido a los primeros tropiezos de esta nueva temporada han provocado los primeros nervios en el equipo directivo de la capital de España.

 

Es pronto aún para que se tomen decisiones tan drásticas como la de prescindir del técnico francés, máxime cuando no hay nadie entre los candidatos sin banquillo que encandile al presidente madridista. Es imposible no acordarse de Jose Mourinho siempre que el Real Madrid entra en crisis de resultados y más ahora que el portugués está sin equipo pero tanto Florentino como su hombre fuerte, Jose Ángel de la Casa, saben que traer al portugués dividiría al madridismo y supondría volver a una guerra de trincheras contra todo y contra todos que de momento no están dispuestos a provocar. Parece una paradoja, de esas muchas que tiene el fútbol, pero será el Sevilla del defenestrado Julen Lopetegui (desde su salida no ha vuelto a hablar con Florentino Pérez) quién medirá las fuerzas de un crédito hacia Zidane que vive sus horas más bajas.