Florentino Pérez corta cabezas y señala los responsables del ridículo

Florentino Pérez corta cabezas y señala los responsables del ridículo

El Real Madrid está a punto de explotar

Florentino Pérez tiene un enfado monumental, de libro, histórico, y que tendrá consecuencias, o eso espera la afición de Real Madrid. Piden soluciones de manera urgente, y que aproveche que todavía está abierto el mercado invernal, para traer nuevas caras, si es posible, o, al menos, poner en la calle a varios cracks. Porque, hasta la fecha, tan solo se ha ido Luka Jovic, mediante una cesión, que ha regresado al Eintracht de Frankfurt.

El primer señalado, como no, es Zinedine Zidane, del que ya se ha tratado y se ha hablado lo suficiente, y lo que aún queda por venir. Su puesto pende de un hilo muy fino, y su destitución es cuestión de días, si vuelven a hacer el ridículo en algún partido cercano. Pasando a los futbolistas, muchos se arrastraron y dieron vergüenza ajena, como Eder Militao, que tuvo la oportunidad de jugar, tras muchos meses desaparecido. Y marcó un gol, pero fue un estorbo y un peligro.

Militao

Los 50 millones de euros que pagaron por el brasileño se tiraron a la basura. Ahora mismo, muchos dudan de si tiene nivel para un equipo de La Liga Santander. Y su compatriota Vinicius Junior era otro que regresaba al once inicial, tras encadenar suplencias. Ya se sabe que han intentado echarle, pero no ha recibido ofertas, y viendo su actuación ayer, no es de extrañar el porque. No se va ni de su sombra, y apunta a quedarse en eterna promesa.

Pasando a los laterales, encontramos a Álvaro Odriozola y Marcelo. Uno está acabado, y sus mejores días con cosas del pasado, y otro lo ha estado siempre, pues a sus 25 años no es normal jugar con esa desidia. Su salida está cercana, y por eso no entienden que hacía jugando, si es verdad que se irá. Del ‘12’, simplemente, no hay nada que decir que no se haya dicho ya. Como de Isco Alarcón, otra vieja gloria, que se dedica a cobrar y a chupar del bote, por no hacer nada.

Para acabar, está Eden Hazard, que entró como revulsivo, y no se fue de nadie. 160 ‘kilos’, para acabar jugando en este tipo de partidos, y encima siendo ridiculizado.

Fuera todos.