Leo Messi amenaza a dos fichajes recientes del Barça

O demuestran su nivel, o se van

Leo Messi amenaza a dos fichajes recientes del Barça

El irregular rendimiento del Barça, y los resultados que está cosechando, se explican con el pobre desempeño de algunos futbolistas. Porque hay muchos que están lejos de su mejor versión, y que difícilmente volverán a ser lo que en su momento fueron. Es el caso de Sergio Busquets y de Jordi Alba, dos de los más claros y destacados, pero tampoco hay que olvidar a Antoine Griezmann, que sigue sin funcionar, o, incluso, a un Leo Messi que hasta el pasado fin de semana solo había marcado de penalti.

No obstante, con su brillante actuación ante el Real Betis Balompié, donde le bastaron 45 minutos para ser el MVP del encuentro, despejó las dudas. En cambio, hay otros que todavía no lo han conseguido, a pesar de que han tenido oportunidades para ello, y de sobra. Y en ese saco está Frenkie de Jong, que sigue siendo indiscutible, ya que todavía hay esperanzas para que sea ese crack que marca las diferencias. Pero no hay indicios recientes para el optimismo.

De Jong

Su gran hacer en el Ajax de Ámsterdam provocó que Josep María Bartomeu tirara la casa por la ventana y pagara 75 millones de euros por su firma. Aunque la realidad es que, de momento, no ha demostrado casi nada, salvo algunos detalles de su inmensa calidad. No participa en la creación de jugadas, y no se parece en nada a aquel centrocampista que asombró a todo el planeta. Tiene que coger más peso en la plantilla, y más confianza en sí mismo.

Por suerte, aún es joven, y solo tiene 23 años. Y ese es el argumento que le juega en contra a Miralem Pjanic, que aterrizó hace pocas semanas, y que esperaban que tuviera un impacto inmediato, sin necesitar de un periodo de adaptación. Algo, entre comillas, lógico, pues ya ha entrado en la treintena, y tiene una gran experiencia a sus espaldas. Precisamente ese es el argumento que usaban para defender su intercambio con Arthur Melo, mucho más joven.

El internacional bosnio todavía ni siquiera se ha asentado en el once inicial, y ya preocupa a un gran sector de la afición.

Corre el riesgo de ser un ‘pufo’.