“No es para tanto”. El amigo de Messi que levanta dudas en el Barça

“No es para tanto”. El amigo de Messi que levanta dudas en el Barça

Está bajando el nivel.

El peligro del ascenso vertiginoso se está notando con un futbolista del Barça. El crecimiento acelerado puede ser totalmente contraproducente cuando se regresa a la realidad. Ansu Fati apareció esta temporada como una de las grandes apuestas de Ernesto Valverde en los primeros partidos. Las lesiones de los referentes le abrieron la puerta a algunos canteranos, pero sorprendió que un jugador tan joven formara parte del equipo titular. Messi desde el principio avisó que era necesario cuidar y llevar con calma al atacante para que no se perdiera.

A los futbolistas retirados que se les preguntaba por el talento de Fati, respondían prácticamente el mismo mensaje, el cual tenía que ver con la cautela para encaminar la carrera del futbolista.

En los últimos partidos han empezado los problemas, ya que está perdiendo esa frescura que le permitía volar sobre el terreno de juego y superar a los rivales. El cuerpo técnico cree que debe volver a jugar con los de su edad para recuperar la confianza perdida.

Las redes no perdonan al protegido de Messi

En las redes sociales sus recientes actuaciones han hecho saltar las críticas. Los comentarios que más se repiten tienen que ver con que se sobre estimó su rendimiento  al principio y ahora muestra su verdadera versión.

Ansu Fati es un gran talento y hasta Messi notó que tiene condiciones impresionantes para su edad, pero era normal pensar que experimentaría un bajón en su rendimiento en algún momento. Lo que determinará de qué está hecho, es su respuesta frente a la adversidad. Los problemas se encuentran representados por una despiadada opinión pública de aficionados tan exigentes como los blaugranas. Hay mucha responsabilidad  sobre un jugador que requiere tiempo para salir del cascarón y tener un desempeño equilibrado. Existen dos preguntas que invaden la cabeza de los culés. ¿Se trata de un mal momento de Fati? ¿O todo lo anterior fue un espejismo?