Setién da el visto bueno: el cambio de cromos que Bartomeu acuerda

Encontrar refugio a los cedidos es otra de las prioridades del Barça, que cuenta con varios jugadores a préstamo fuera del club, como Philippe Coutinho, Francisco Trincao o Pedri González. Aunque, a diferencia de ellos tres, hay otro jugador que no entra en los planes y ni siquiera realizará la pretemporada. Hablamos de Moussa Wagué, que en enero se fue al Niza.

El internacional senegalés fue fichado en 2018, tras su buen Mundial de Rusia con la selección de su país, Senegal. Cinco millones de euros pagaron por él, que primero tuvo que superar un año en el filial, en Segunda División B, aunque tuvo la oportunidad de debutar a las órdenes de Ernesto Valverde. Pero, con Quique Setién, no tiene ni la más remota posibilidad, pues no es de su gusto.

En la Ligue 1, apenas ha podido jugar 197 minutos, repartidos en cinco choques, si bien ha dado dos asistencias. Pero no podrá mejorar sus números, ya que hace unas semanas la liga se dio por finalizada. Su próxima parada será, de este modo, La Liga Santander, donde tiene varios pretendientes. El que más, el Sevilla de Julen Lopetegui. Algo que pueden aprovechar para hacerse con Diego Carlos. 

Los hispalenses buscan a un lateral derecho para dar descanso a Jesús Navas, ya muy veterano, y Josep María Bartomeu no se lo ha pensado dos veces antes de sacar el nombre del central brasileño. Porque es de su completo agrado, y lo quiere como sea, pero echa para atrás su precio, ya que ha sido tasado por Monchi en la friolera de 60 ‘kilos’. Casi nada.

Una cifra que espera rebajar con la entrada de Wagué, además de otros futbolistas, como Oriol Busquets o Riqui Puig, e incluso, Ivan Rakitic. Un movimiento que cuenta con el visto bueno de Setién.

Al tanto.