Si se va Zidane, se lo lleva con él: su protegido en el Real Madrid
Tiene a un mimado en el vestuario
En el Real Madrid hay una serie de protegidos, bien por parte de Florentino Pérez, como es el caso de Vinicius Junior y Rodrygo Goes, o bien por parte de Zinedine Zidane. Y en este último saco se encuentran jugadores como Marcelo, Dani Carvajal o Karim Benzema, que tienen una gran relación con su entrenador. Por ese motivo, nunca ha estado en peligro su puesto como titular, y se ha encargado de vetar fichajes que pudieran suponer un riesgo para ellos.
Y también tenemos a Raphaël Varane, con el que siempre ha tenido muy buenas migas, y nunca han ocultado la química que hay. Algo que a pocos preocupaba, y de hecho, aliviaba a casi toda la afición, ya que, por ejemplo, antes de que el técnico galo regresara al club, el central estaba meditando muy seriamente la opción de cambiar de aires. Fue él quien lo impidió, y el que hizo todo lo posible para que no sucediera, y le convenció para seguir.

El problema es que el rendimiento el campeón del Mundial de Rusia en 2018 ha caído en picado. Y muchos se preguntan porque sigue siendo titular, ya que empeora a sus compañeros, en especial a Sergio Ramos, y comete errores de bulto, que suelen costar puntos. Cada vez tiene menos crédito, y muchos expertos señalan que ha entrado en un bucle del que no hay escapatoria. Está bloqueado, y la mejor solución para todos sería que hiciera las maletas.
‘Zizou’ sigue apostando y confiando en él, y este verano y el anterior declinó la posible llegada de algún central para discutirle el puesto. Porque cabe recordar que Eder Militao ya estaba fichado antes de que él llegara, y tampoco le ve como un jugador capaz de ser intocable en el Madrid. El presidente, por su parte, tampoco vería con malos ojos deshacerse del canterano del Lens, si a cambio puede recibir una cantidad de dinero importante.
Es Zidane el que lo impide. Aunque Varane puede estar tranquilo, porque le ha asegurado que, mientras él siga en el banquillo del Santiago Bernabéu, no tiene de que preocuparse. Y si se va, se lo llevara con él.
Es su ojito derecho.