Unay Emery toca a una pieza clave de Zinedine Zidane

Unay Emery toca a una pieza clave de Zinedine Zidane

Y el francés se niega en redondo a venderle

Los descartes de Zidane los sabe Florentino Pérez desde hace meses, y el presidente blanco ha jugado con ellos para hacer caja o tratar de interponerlos como parte de alguna operación mayor, como es el caso de las avanzadas negociaciones que el presidente blanco tiene con Daniel Levy, máximo dirigente del Tottenham Hotspur, sobre un truque Dani Ceballos-Christian Eriksen.

También los transferibles con los que sí se cuenta pero por los que están dispuesto en Concha Espina a oír ofertas, más si cabe si con ese cartel colgado en ellos se consigue traer a Paul Pogba, ya sea mediante Ceballos o Isco Alarcón. Algo parecido ocurre en la opción, que gusta a Zizou, de intercambiar a Sadio Mané por Marco Asensio.

Zinedine Zidane, en un entrenamiento

La de Asensio e Isco (y Ceballos) son las excepciones, pero ¿qué pasa con los habituales del banquillo que Zidane quiere para la causa? Muchos de ellos han visto con recelo la llegada de las nuevas incorporaciones y ven amenazados sus ya maltrechos minutos. Por lo que, sin estar en primera línea de mercado, hay algunos que pretenden minutos y tienen ofertas para conseguirlos fuera de Madrid.

Lucas Vázquez es quizá, por el peso específico y el papel jugado tanto con Lopetegui, como con Solari y Zidane, un caso más paradigmático. El gallego sigue siendo ese número 12 o 13 que, aún considerado importante por los entrenadores, ve cada vez más difícil hacerse un hueco fijo en el once titular. Y varios clubes importantes le quieren.

Uno de ellos es el PSG, pero su situación en París puede ser similar a la de Madrid. La otra posibilidad que Lucas ve con buenos ojos es la de Londres, con el Arsenal. Su técnico, Unai Emery, confía en Vázquez y le aseguraría una importancia capital en su proyecto. Tanto es así que el Arsenal ofrecería 32 millones al Real Madrid por él, y los blancos, que quieren llenar las arcas, podrían aceptar por 8 más, es decir, 40 kilos. Sin embargo Zizou no quiere oír hablar de venderlo, sabe que es un recambio de garantías.  

¿Será este el verano de la despedida de Lucas Vázquez del Bernabéu?, desde luego parisinos y gunners así lo desean.