Zidane planea su 2x1 para el proyecto de Florentino: guerra abierta

Decisiones. A día de hoy esa es la palabra que está rondando continuamente por la cabeza de Florentino Pérez y de Zinedine Zidane. La última derrota liguera frente al Alavés en Valdebebas ha hecho mucho daño en el vestuario merengue y la próxima ventana invernal se ha presentado como crucial para las aspiraciones del club esta temporada. Varios jugadores han ido quedando sentenciados conforme se han ido sucediendo los partidos, pero otros estaban tratando de apurar sus opciones de convencer al técnico galo… sin ningún tipo de éxito. El mejor ejemplo de ello es Mariano Díaz.

Aunque apenas ha contado para Zidane en los dos últimos años, la lesión de Karim Benzema y la ausencia por la COVID de Luka Jovic le han brindado una oportunidad de oro al delantero dominicano. Una oportunidad que, por otra parte, no está aprovechando. A pesar de que fue el autor del gol del Real Madrid en Villarreal, las sensaciones que deja sobre el terreno de juego dejan mucho que desear, más allá de que tampoco está fino de cara a puerta.

Los número goleadores de Benzema tampoco hacen balance a las necesidades blancas, pero Mariano, a diferencia del francés, muestra también ciertas carencias a la hora de asociarse con el resto de jugadores de ataque lejos de la zona de pelirgo y sus condiciones técnicas son bastante limitadas para lo requerido por el técnico galo. Ya en la última ventana de traspasos estuvo a punto de abandonar Chamartín para poner rumbo a Sevilla, pero finalmente la operación se truncó por su alto salario.

De la misma forma y aunque ahora no está a disposición de su entrenador, Jovic tendrá que dar un lavado de cara a su imagen si quiere contar para el futuro proyecto de Florentino, ya que el serbio fue una apuesta personal del presidente y esta decepcionando por todos los lados.

La intención del club es dar salida a uno de ellos para abaratar la llegada de un galáctico a la capital, pero si el rendimiento de ambos sigue siendo tan nefasto verán la puerta de salida para hacer hueco a ese anhelado anotador que lleva buscando el Madrid desde la marcha de Cristiano Ronaldo y que aun no ha aterrizado: Karim Benzema tampoco puede relajarse, su continuidad pende de un hilo.