Zinedine Zidane lo regaló (y ahora el Madrid no puede recuperarlo)

Tomó una decisión de la que ya se arrepienten

Zinedine Zidane lo regaló (y ahora el Madrid no puede recuperarlo)

Zinedine Zidane tomó una decisión de la que aún se arrepienten en el Real Madrid. Porque muchos se preguntan en que estaba pensando cuando le abrió las puertas de salida a Achraf Hakimi, para que acabara en el Inter de Milán de Antonio Conte. No es para menos, pues daban por seguro que regresaría a la que fue su casa, tras dos años brillantes en las filas del Borussia Dortmund, pasando de ser una gran promesa, a uno de los mejores del planeta en su puesto.

Y cabe recordar que solamente tiene 22 años, por lo que todavía es muy joven, y aún tiene un gran margen de mejora. 40 millones de euros es la cifra por la que Florentino Pérez le abrió las puertas de salida, una cantidad que, a decir verdad, parece bastante baja, teniendo en cuenta sus cualidades y su experiencia. De momento, en la Serie A ha dejado algunos destellos, si bien aún no ha podido demostrar todo el futbol que hay en sus botas.

Achraf

En el Santiago Bernabéu, por otro lado, ya se tiran de los pelos y se preguntan en que estaban pensando. Y más, viendo las lesiones de Dani Carvajal, de Álvaro Odriozola y de Nacho Fernández, que han causado un gran vacío en el puesto que podría haber ocupado el hispano-marroquí. Por suerte, Lucas Vázquez ha sorprendido, y ha ofrecido un buen nivel cuando le ha tocado jugar allí. Pero no es ninguna solución, en absoluto, solo un parche temporal.

Lo peor es que, para poder traer de vuelta a Achraf en un futuro, si explota aún más, hará falta negociar con el Inter. Y es que no fueron capaces de incluir una opción de recompra en su contrato, y le dejaron marchar, sin pensar en el futuro. Es decir, que en el Giusseppe Meazza respiran aliviados, y creen que tendrán futbolista para rato. Es la pieza que necesitaba Conte para ocupar el puesto de carrilero en su defensa de tres centrales.

Zidane no le perderá de vista, y espera que el tiempo le dé la razón. Si no, se le echarán todavía más encima.