Abramóvich sucumbe ante Florentino y Al-Khelaifi: 2 firmas y luz verde

Antonio Rüdiger es uno de los futbolistas que más están dando que hablar en los últimos meses ya que la situación contractual del defensa alemán ha incitado a algunos de los principales clubes europeos, especialmente al Real Madrid y al PSG, a tantear seriamente la posibilidad de hacer frente a las exigencias económicas del jugador para cerrar sus servicios conforme finalice la temporada. El central berlinés finaliza contrato el 30 de junio y su representante ha dejado entrever en las últimas semanas que el deseo del jugador es cambiar de aires y buscar una nueva aventura lejos de Londres, factor que ha impulsado a Florentino Pérez y Nasser Al-Khelaifi a fijar sus ojos en él para lanzar una ofensiva el próximo verano haciendo frente a esos 12 millones netos que quiere cobrar por campaña.

Y es aquí donde Román Abramóvich ha jugado un papel esencial. Ese supuesto deseo de Rüdiger ha provocado que el magnate ruso, ya haciéndose a la idea de su salida, haya puesto en marcha dos movimientos dentro del propio vestuario Blue, dos movimientos que tocan directamente la parcela defensiva y que hacen ver con mejores ojos la decisión del teutón: las renovaciones de Trevoh Chalovah y de Andreas Christensen.

Por un lado, el joven zaguero de 22 años hace pocos días extendió su vinculación con el Chelsea hasta 2026 tras haberse convertido en este primer tramo de la campaña en una de las revelaciones de la temporada en Europa, algo que le está permitiendo acaparar cada vez más minutos en el equipo bajo el mando de Thomas Tuchel. Por ende, la posible salida de Rüdiger el próximo verano podría ser clave para que el jugador inglés termine de asentarse en el ‘11’ tipo de alemán.

Por otro lado, en las últimas horas el diario Standar ha hecho eco de que la negociación de Christensen con su presidente está muy avanzada para cerrar esa ansiada renovación. El defensa, a pesar de las dudas generadas durante sus primeras campañas en Stamford Bridge, se ha convertido en uno de los hombres de confianza de Tuchel, motivo por el cual el magnate ruso ha acelerado su plan para evitar que otros colosos tienten al jugador, que también finaliza contrato en junio. Eso sí, ha sido el propio futbolista danés el que en las últimas horas ha afirmado que está “muy feliz” y que la firma para extender su vinculación con el club es inminente, a falta de los últimos flecos.