Tras echar a Mourinho: Daniel Levy revela su tapado para el Tottenham

El Tottenham ha vivido una auténtica montaña rusa esta temporada, y todavía queda. Han pasado por todo, desde momentos en los que parecía que podrían pelear incluso por la Premier hasta otros en los que la sensación era la de que se estancarían en la zona media de la tabla. Lo cierto es que estas rachas han ido lastrando al equipo, no llegando a mostrar un juego convincente, motivo por el cual desde la directiva decidieron echar a José Mourinho. Ahora, varios son los nombres que manejan para llegar a su banquillo, siendo la leyenda del Liverpool, Steven Gerrard, quien podría dar la sorpresa y aterrizar en el equipo de Kane, Son y compañía. 

Según apunta el medio Express, la clave que habría terminado de convencer a los dirigentes del club de Londres sería el extraordinario papel del inglés al frente del Rangers. Además, conoce a la perfección la Premier League por lo que creen que su presencia en los banquillos puede ser lo que realmente necesitan. 

Después de conquistar la liga escocesa, ya son varios los equipos que han preguntado por él, incluso se hablaba de una vuelta a Liverpool en el caso de que Jurgen Klopp acabase saliendo, pero parece poco probable, ya que de momento, y a pesar de todos los contratiempos, siguen confiando en Anfield en el míster alemán.  

Gerrard se ha acabado de confirmar como el favorito de Daniel Levy para dirigir su Tottenham. Aunque lógicamente hay otros nombres sobre la mesa. En un primer momento, sonó el español Marcelino, pero el que actualmente es entrenador del Athletic Club ya ha dicho que ni sabe nada ni quiere saber, por lo que su candidatura se ha descartado. Otra posibilidad es Julian Nagelsmann, un entrenador que gusta, tanto, que podrían verse inmersos en una lucha por él junto al Bayern de Múnich. Por último, otro hombre posible es Roberto Martínez, actual seleccionador de Bélgica, aunque este no parece que tenga intención de dejar el cargo.

Todos los caminos parecen conducir al ex del Liverpool, que podría llegar para devolver la esperanza a un proyecto que se estancó con el luso al frente.