Bellingham empieza a levantar sospechas en el vestuario del Real Madrid
El rendimiento irregular del inglés está provocando dudas en el Madrid

Jude Bellingham es uno de los mejores jugadores del Real Madrid y una pieza indiscutible en el centro del campo. El inglés irrumpió la temporada pasada en el conjunto blanco, en su primer año en la entidad madrileña, consagrándose como uno de los futbolistas más cruciales para el devenir del equipo. Sin embargo, en su segundo curso, está siendo una sombra absoluta del futbolista que impresionó la campaña anterior.
El centrocampista está teniendo algunos problemas físicos, especialmente en el hombro, que le impiden ser el jugador que demostró ser el año pasado. Además, su rendimiento más futbolístico sobre el terreno de juego está siendo muy irregular, algo que crea dudas y sospechas en el vestuario del Madrid por cómo se debería tratar su caso, especialmente después del nivel que ha demostrado.
Jude Bellingham empieza a crear sospechas en el vestuario del Madrid por su nivel
La llegada de Kylian Mbappé el pasado verano y la necesidad primordial de Carlo Ancelotti de hacer jugar siempre a las cuatro estrellas juntas ha condicionado mucho su juego esta temporada, viéndose relegado a realizar tareas más defensivas e incluso de creación de juego, mientras que el curso pasado era un futbolista con más llegada y con más capacidad de sorprender en ataque.
En esta campaña, se ve que no está a gusto sobre el césped y no se siente cómodo con el estilo de que juego que ha querido usar el técnico italiano. Además, su actitud en el campo tampoco está siendo la mejor y está cometiendo algunas entradas contundentes que, un día, le saldrán más caro. Cerca del descanso, en el partido contra el Celta de Vigo, cometió una falta muy dura que le podría haber costado la roja de cara al clásico de Liga contra el FC Barcelona.
El conjunto blanco venderá a una de las cuatro estrellas
La dirección deportiva quiere que vuelva el mejor Bellingham de cara a la temporada que viene y una de las acciones para que eso ocurra será vender a una de las cuatro estrellas del equipo. El sacrificado será Rodrygo, para que así el inglés pueda tener más espacios en el terreno de juego, como el año pasado, y vuelva a demostrar el tipo de futbolista que es.