Ha pasado de reírle las gracias a Vinícius a convertirse en uno de los más críticos con Mbappé
El cambio de actitud de uno de los pesos pesados del Real Madrid en torno a Mbappé
Vinícius Júnior ha protagonizado una de las grandes divisiones del vestuario durante la temporada. Abanderado del clan brasileño, y enfrentado frontalmente con el clan francés de Mbappé, era visto por algunos como un mal menor. Lo que sí es cierto es que Mbappé llegó el verano pasado a Madrid y entró como elefante por cacharrería. Con la vitola de número uno y queriendo eclipsar a los que habían sido los pesos pesados de la plantilla hasta entonces.
El primer damnificado fue Vini, que veía como la opción de volver a intentar ganar el Balón de Oro se le desvanecía por completo con la presencia del internacional galo. Esto puso en pie de guerra a otros jugadores como Belingham o Rodrygo Goes, que veían amenazado ser el foco mediático del equipo con la llegada de Kylian. La animadversión hacia el ex del PSG también ha llegado al futbolista con mayor ascendencia de la plantilla.
Modric no soporta los egos de Mbappé
Luka Modrić es el máximo referente dentro del vestuario del Real Madrid. Su historia en el club lo avala, y por eso, cada vez que toma la palabra, sus compañeros guardan silencio y escuchan. Con el equipo, sin haber logrado ningún título esta temporada, el croata es uno de los líderes del vestuario y no se calla la boca si tiene que recriminarle algo a algún compañero. Y en este caso, el foco ha sido Mbappé.
A punto de cumplir 40 años en septiembre, Modric ha percibido que los humos con los que ha entrado Mbappé no han beneficiado en nada a la consecución de títulos colectivos. El capitán blanco cree que Mbappé solo hace la guerra por su cuenta, priorizando el lucimiento personal, a pesar de los 40 goles que lleva anotados esta temporada. Algo que a Modric no le ha gustado nada y se lo ha hecho saber al francés.
Modric se irá del Real Madrid
A pesar de sus reticencias, y de querer acabar su etapa como futbolista en el Real Madrid. El club y Xabi Alonso ya no están por la labor de aguantar un año más a un futbolista que creen que ya ha terminado su ciclo en la casa blanca. A pesar de los esfuerzos del de Zadar por convencer a la cúpula blanca, sus intentos han sido infructuosos. Modric se marchará, pero dejando cada uno en su sitio después de un año de mucha tensión y división en el vestuario merengue.