Mino Raiola inaugura el mercado con una bomba: Haaland e Ibra alucinan
El agente italiano lo tiene casi cerrado
La apuesta en firme que Mino Raiola tiene entre manos por uno de sus jugadores más controvertidos, si no el más, pero a la vez carismáticos ha dejado convulsionada a la afición transalpina por el destino que fija a su jugador y sobre todo por el ambicioso objetivo que se marca el mismo futbolista con respecto a sus expectativas más inmediatas, las que marcarán su futuro en las dos próximas temporadas. En este caso, dos de los representados de Raiola, Erling Haaland y Zlatan Ibrahimovic, ambos son bastante escépticos con el éxito de la operación.
Y es que Mario Balotelli y su representante parece que se han puesto de acuerdo con respecto al lugar en el que Super Mario puede levantar el vuelo de su carrera justo antes de que está se extinga antes de tiempo. Y lo ha confirmado el mandamás del club de destino: "la negociación con Mario Balotelli está en un 85%", comentó al medio de comunicación masiva A Spor el presidente del Adana Demirspor turco, Murat Sancak.
Sobre este hecho, quizá no les deje demasiado sorprendidos el club de destino del jugador italiano, que seguramente sea desconocido para el gran público, sino lo que tiene en mente el futbolista al fichar por el equipo otomano. Y es que Balotelli solo tiene una cosa en mente de aquí a la próxima temporada y media: la Copa del Mundo de Qatar 2022, que se ha fijado como su gran meta profesional.
El futbolista, de solo 30 años, fue la sensación del fútbol italiano y por momentos pareció que las esperanzas puestas en su figura se veían reforzadas con su talento y rendimiento sobre el césped, sin embargo el delantero pronto y en repetidas ocasiones sacó su cara B, una muy oscura que le ha alejado de los focos y que le ha defenestrado como un jugador, a una edad de plena vigencia, defenestrado y devaluado. Inter, City, Milan, Liverpool, Marsella, Niza, Brescia y Monza han sido sus destinos, donde nunca ha terminado de brillar en ninguno. Desde luego, este puede ser su último tren, al menos en clave de La Nazionale, lo es.