Buckingham ha estado ocultando el preocupante empeoramiento de Kate Middleton
La Princesa de Gales ha tenido que ser hospitalizada
Después de haber superado con éxito su lucha contra el cáncer, Kate Middleton ha mostrado su cara más feliz a la población. Su mensaje de esperanza y alegría ha contagiado a la ciudadanía, donde no hay nadie que no se haya alegrado de que la Princesa de Gales se recuperara totalmente de una enfermedad que hizo que muchos se preocupan por la vida de una Kate que desde que le fue diagnosticado el cáncer ha tratado de mantener bajo el máximo secreto cualquier tipo de noticia sobre su estado real de salud. Lo que ha hecho que cuando ha empeorado se haya tratado de ocultar de todas las formas posibles.
En este sentido, tal y como han confirmado desde el programa Fiesta de Telecinco, a lo largo de los últimos días, no han sido pocos los rumores que han circulado sobre el posible estado de salud de Kate Middleton. Algo que llegó al límite con la ausencia de la Princesa de Gales en una de las citas más importantes en el mundo de la hípica, la Royal Ascot, donde había confirmado su asistencia, pero en la que acabó sin presentarse.

Kate Middleton necesitó tratamiento médico urgente
Según cuentan en el citado programa, el pasado miércoles, Kate Middleton se despertó con mucho malestar. No se sentía bien por un malestar general que la dejó convaleciente durante toda la mañana. Todos pensaban que iba a ser algo temporal. Sin embargo, con el paso de las horas y viendo que Kate no mejoraba, la Princesa de Gales fue derivada a los servicios hospitalarios, donde la mantuvieron en observación durante el resto del día.
En este sentido, a pesar de que se descartan problemas de gravedad en la salud general de Kate Middleton, no han sido pocas las especulaciones que apuntaban a algo más importante de lo que se pudiera llegar a esperar. Pues, como no ha habido ningún tipo de comunicación por parte de Buckingham, se ha hablado de todo tipo de problemas de salud para Kate Middleton.
Así pues, la ausencia de la Princesa de Gales en la Royal Ascot hizo que los rumores sobre su estado de salud se dispararan. Algo que empeoró cuando se supo que necesitó tratamiento médico durante el pasado miércoles.