Carlos III toma la decisión más delicada sobre su funeral y los invitados

A pesar de que Carlos III se encuentra en un momento relativamente bueno después de haber comenzado a responder al tratamiento contra el cáncer al que se ha sometido, el monarca inglés sigue siendo muy consciente de que no lo tiene todo a favor en su lucha contra la enfermedad. Los médicos ya le han comunicado que su salud ha sufrido mucho y que va a quedar hipotecada por culpa de haber sido tratado de formas tan agresivas.

Una situación que ha llevado a Carlos III a plantear las bases y la estructura de su funeral, definiendo así a los invitados a una ceremonia que será diferente a la de su madre.

En este sentido, tal y como afirman fuentes cercanas a la Casa Real de Gran Bretaña, Carlos III ha tomado la decisión de ser el primero en realizar un acercamiento y mostrarse abierto a algún tipo de reconciliación con el príncipe Harry y Meghan Markle, a los que ha invitado al funeral, junto a sus dos hijos, Archie y Lilibet. Un movimiento inesperado que no busca otra cosa que cerrar heridas y dejar una Casa Real más unida tras su muerte.

Ni Harry ni Meghan contaban con ser invitados al entierro de Carlos III

La realidad es que nadie esperaba este movimiento por parte de Carlos III. El monarca inglés está harto de vivir en un enfrentamiento eterno contra su hijo y su nuera. Se ha cansado de combatir en silencio contra su hijo menor y de todos los problemas que ello conlleva.

Además, la presencia de Harry y Meghan no será el único cambio a aplicar. Y es que Carlos III quiere un luto más corto y que su cuerpo solamente sea expuesto durante unos 11 días. Algo que cambiaría por completo el transcurso del funeral del Rey de Inglaterra.

Así pues, tanto Harry como Meghan Markle ya saben que van a ser invitados al funeral de Carlos III en uno de los gestos más inesperados por parte del Rey de Inglaterra, que espera que haya paz de una vez por todas en la Casa Real de Gran Bretaña.