Carolina de Mónaco guarda un secreto que obligaría a abdicar al Príncipe Alberto
La hermana de Alberto de Mónaco sueña con llegar al trono del Principado
Hace mucho tiempo que Carolina de Mónaco guarda cierto rencor hacia la figura de su hermano Alberto II. La hija mayor del que fuera Príncipe monegasco, Rainiero de Mónaco siempre soñó con llegar a ser su sucesora en algún punto de su vida. Un deseo que se truncó por completo cuando llegó el nacimiento del único hijo varón de Rainiero, un Alberto II que, sin ser el mejor preparado ni desearlo en exceso acabó asumiendo el puesto principal en el Principado de Mónaco, algo que nunca ha sabido llevar su hermana, Carolina.
En este sentido, tal y como se han encargado de revelar fuentes cercanas al Principado de Mónaco, Carolina nunca ha sido capaz de perdonar a su hermano por lo que considera que fue una gran injusticia. La hija mayor de Rainiero siempre se ha considerado la mejor preparada para convertirse en Princesa de Mónaco. En especial después de conocer todos los secretos que esconde un Alberto II que podría caer si sale a la luz todo lo que ha hecho a lo largo de su vida.
Si Carolina habla, el Príncipe Alberto caerá
Gracias a lo que hemos podido saber, Carolina de Mónaco está al día de todo lo que hace y deja de hacer su hermano pequeño. Lo que la ha llevado a conocer los peores secretos de la vida del Príncipe de Mónaco, que no ha tenido una trayectoria libre de pecado precisamente. Más bien todo lo contrario. Pues, más allá de tener dos hijos ilegítimos, hay quien dice que ha hecho cosas mucho más graves para la Realeza, lo que podría llegar a obligar a abdicar.
En esta misma línea, Carolina sabe la identidad de la mayoría de mujeres con las que Alberto II le ha sido infiel a Charlene, incluso manejaría el nombre de algunos hombres que también podrían haber pasado por la cama de su hermano. Una serie de secretos que de ver la luz podría hacer que Alberto cayera de forma instantánea.
Así pues, parte de la estabilidad de la Casa Real de Mónaco está en manos de la responsabilidad y confidencialidad de Carolina, que sabe que si habla puede hacer caer a su hermano. Lo que le abriría las puertas al trono de Mónaco.