Charlene de Mónaco recae de una adicción que la obligó a ser ingresada años atrás

El abuso de fármacos sigue persiguiendo a la Princesa Charlene

Charlene de Mónaco recae de una adicción que la obligó a ser ingresada años atrás

La vida de Charlene de Mónaco está muy lejos de ser la que se había imaginado cuando le dio el sí quiero al Príncipe Alberto. Lejos de vivir rodeada de lujos y aprovechando todos los privilegios que le otorga el hecho de ser la Princesa de Mónaco, la sudafricana se ha visto sumida en un mundo lleno de oscuridad y marcado por la tristeza y por la falta de ilusión por la vida. Y es que entre el estrés de ser una figura tan conocida y las constantes infidelidades de su marido, Charlene cayó, años atrás en una adicción de la que sigue sin poder salir.

En este sentido, tal y como informan fuentes muy cercanas al Principado de Mónaco, todavía hoy, tres años después de su ingreso en un centro de desintoxicación, Charlene sigue abusando de los fármacos. Se trata de ansiolíticos y somníferos, los cuales usa para tratar todo el estrés que vive en su día a día. Especialmente cuando debe aparecer públicamente junto a su marido.

De hecho, tal y como hemos podido saber, después de su aparición en el Gran Premio de Fórmula 1, Charlene volvió a ingerir varias pastillas para paliar la ansiedad de estar en una situación que era especialmente incómoda para ella. Pues tuvo que mostrar durante todo el fin de semana una cara amable, cuando lo último que quería era sonreír y aparecer cerca de un Alberto II por el que solo siente rechazo.

Charlene

Charlene ya fue ingresada en 2022

Hace poco más de tres años, los servicios médicos de Mónaco ya internaron a Charlene en una clínica de desintoxicación para que dejara atrás el abuso de las pastillas. Algo que nunca acabó de funcionar. Pues, ahora en pleno 2025 hemos podido saber que la Princesa de Mónaco sigue padeciendo la misma adicción que la llevó a ser ingresada varios años atrás. Una situación especialmente preocupante, ya que una dosis desmedida pondría en peligro la vida de Charlene.

Así pues, no ha habido ningún tratamiento que haya sido capaz de desintoxicar a una Charlene que sigue necesitando el abuso de los fármacos para sobrellevar todo el estrés que le trae su posición como Princesa de Mónaco y esposa de Alberto II.