Empleados de Zarzuela explican a sus tres hijos que la reina Sofía vuelve a fumar a escondidas

La reina Sofía, entre la soledad y un viejo hábito que preocupa a sus hijos

Empleados de Zarzuela explican a sus tres hijos que la reina Sofía vuelve a fumar a escondidas

Felipe VI, la infanta Elena y la infanta Cristina están muy inquietos por la salud de sus padres. La edad no perdona y tanto Juan Carlos I como la reina Sofía han experimentado algunos problemas propios del paso del tiempo. Tropiezos, olvidos y cierto deterioro han hecho que sus hijos presten especial atención a su bienestar.

Sofía, además, lleva un año especialmente difícil. La muerte de su hermano Constantino de Grecia la golpeó con fuerza, y el avance del Alzheimer en su hermana Irene ha sido un golpe todavía mayor. La que fuera su gran compañera de vida ya no la reconoce.

Felipe VI, que vive en el Pabellón del Príncipe, dentro del recinto de Zarzuela, pasa muchas noches en el Palacio con su madre. No quiere dejarla sola. Elena y Cristina también la visitan con frecuencia, intentando que no se sienta aislada. Pero Sofía está triste, y en medio de esa tristeza ha vuelto a un viejo hábito que preocupa a todos: fumar.

 El rey Felipe, la princesa Leonor, la reina Sofía, la infanta Sofía, la reina Letizia e Irene de Grecia

Un secreto mal guardado

La reina Sofía había dejado el tabaco hace tiempo. Los médicos se lo prohibieron debido a su edad y a su estado de salud, pero ella nunca olvidó el placer del cigarrillo después de las comidas. Ahora, en medio de su soledad y melancolía, ha vuelto a encenderlos, aunque lo haga a escondidas.

Los empleados de Zarzuela, que han trabajado con ella durante años, han sido los primeros en notar su recaída. Algunos de ellos, preocupados, decidieron contar la verdad a Felipe VI. No podían seguir guardando el secreto cuando su salud estaba en juego.

El monarca no tardó en hablar con sus hermanas. Todos coincidieron en que debían intervenir, pero sabían que no sería fácil. Sofía es una mujer de carácter, y no le gusta que le digan qué hacer, menos aún en un momento de su vida en el que siente que ha perdido el control sobre muchas cosas.

Elena, quizás la más cercana a ella en este momento, ha intentado convencerla. Sabe que su madre sufre en silencio, pero insiste en que debe cuidarse más. "Mamá, si sigues así, nos vas a preocupar aún más", le ha dicho en varias ocasiones.

Por ahora, la reina Sofía escucha, pero no promete nada. Sigue refugiándose en el cigarrillo, aunque ahora sepa que su secreto ya no es tan secreto.