Felipe VI le obliga a trabajar para seguir viviendo en Zarzuela
Si no cambia su estilo de vida, Felipe VI tomará una decisión dura contra él
En Zarzuela ya no hay espacio para aquellos que quieran vivir de la renta de ser familiares de Felipe VI. El Rey de España se ha hartado de que los hijos de la infanta Cristina y de la infanta Elena se aprovechen de él para vivir rodeados de lujos en la residencia real. Es por este motivo que, para poner fin a esta situación insostenible, Felipe VI ha tomado la decisión de que las puertas de Zarzuela se van a cerrar para todos aquellos que quieran vivir sin dar un palo al agua. Una advertencia que va claramente dirigida a Miguel Urdangarin.
A lo largo de los últimos meses, el varón más joven del clan Urdangarin se ha convertido, por méritos propios, en el mayor dolor de cabeza posible para la Casa Real. Y es que, más allá de no haber mostrado interés alguno en trabajar ni en estudiar nada más, la actitud de Miguel Urdangarin ha hecho que se convierta en un problema muy serio para la imagen de Zarzuela.
Felipe VI lo expulsará si no comienza a trabajar
Ante esta situación, fuentes cercanas a Zarzuela aseguran que, para evitar más problema y para centrar a su sobrino, Felipe VI ha tomado la decisión de prohibirle el acceso a Zarzuela a no ser que comience a ser un hombre de provecho. Lo que implicaría que comience a trabajar y deje de actuar como el niño mimado que siempre ha sido y que lo ha tenido todo hecho, gracias al dinero de un Juan Carlos I que, con las pagas de 10.000 euros a sus nietos, los ha malacostumbrado.
De este modo, ahora le toca a Felipe VI ser el que eduque, por las malas, a varios de sus sobrinos. Y es que la actitud de Miguel no es nada nuevo en la Casa Real. Froilán, en su momento, también se acostumbró a la mala vida y acabó siendo expulsado de España por orden de Felipe VI. Mientras que Victoria Federica también fue expulsada de Zarzuela.
Así pues, el monarca español ha sido muy claro con Miguel Urdangarin. Pues, si quiere tener abiertas las puertas de la residencia real, primero deberá ser un hombre de provecho y ponerse a trabajar de una vez por todas.