Froilán y Victoria Federica, y no son los únicos en la familia, hablan mal de Leonor: “Es peor que la madre”
Unas relaciones familiares marcadas por la distancia y los silencios
Las relaciones dentro de la familia real siempre han sido un terreno delicado, pero en los últimos años la distancia entre Froilán, Victoria Federica y la princesa Leonor se ha hecho más evidente que nunca. Aunque públicamente se mantenga cierta cordialidad, quienes conocen de cerca a los jóvenes Borbones aseguran que la convivencia y el afecto brillan por su ausencia. De hecho, según una fuente vinculada a los Marichalar, la opinión de algunos de ellos sobre la heredera es bastante tensa: “Es peor que la madre”, comentan en privado, dejando claro que la figura de doña Letizia sigue siendo un punto de fricción dentro del clan.
La relación entre Victoria Federica y Leonor prácticamente no existe. A pesar de que la hija de la infanta Elena intente suavizar la situación con algún gesto en redes sociales, como la felicitación pública a la princesa por su cumpleaños o el mensaje durante la jura de la Constitución, detrás de las cámaras la realidad es muy distinta. No se ven, no hablan y no comparten planes desde hace años. Aquellos veranos en los que Victoria Federica jugaba con Leonor y Sofía en Marivent son ya un recuerdo borroso. Cuando la reina Letizia decidió apartar a sus hijas de la imagen deteriorada del antiguo reinado, la relación entre primas quedó prácticamente rota.

Dos mundos diferentes y una familia cada vez más dividida
Mientras Leonor y Sofía crecían protegidas, alejadas de la sobreexposición mediática y también de la rama Borbón más polémica, Victoria Federica se movía en otra dirección. Su vida social, sus amistades y su cercanía con los Urdangarin, especialmente con Irene, que tiene la misma edad que la princesa, marcaron su camino. Resulta curioso que, pese a compartir generación con Leonor, haya sido Irene quien ha ocupado ese espacio afectivo.
Al entorno de la infanta Elena no le sorprende este alejamiento. Existe una especie de norma silenciosa dentro de la familia real: no hablar públicamente de otros miembros. Y Victoria Federica la cumple a rajatabla. Prefiere el silencio antes que un conflicto que pudiera perjudicarla. Pero ese silencio también evidencia algo: entre ella, Froilán y las hijas de los reyes ya no queda ningún vínculo real.
Y no son solo ellos. Los cuatro Urdangarin tampoco mantienen contacto con Leonor y Sofía. Paradójicamente, tienen más trato con Froilán que con sus primas. La familia, fragmentada desde hace años, parece haber aceptado esta distancia como algo natural. Pero para muchos, el desencuentro entre los jóvenes Borbones es un reflejo más de cómo la corona y los apellidos pesan, y separan, incluso dentro de la misma sangre.