Guillermo de Gales comunica a la familia que Carlos III está en fase terminal y asumirá el trono en 2026
La familia real británica atraviesa un momento decisivo marcado por la preocupación y la incertidumbre
El Reino Unido vuelve a vivir días de incertidumbre. Carlos III, que lleva casi un año luchando contra un cáncer de colon, atraviesa el momento más delicado desde que se conoció su enfermedad. Según diversas fuentes, los médicos habrían comunicado a su hijo, Guillermo de Gales, que el monarca ha entrado en una fase terminal.
La noticia cayó como un mazazo en la familia real británica. Nadie esperaba un desenlace tan rápido. Durante meses, el Rey ha intentado mantener su agenda y continuar con sus responsabilidades, pero su cuerpo ya no responde igual. Los mareos y los desmayos son frecuentes. La fatiga lo acompaña incluso en los actos más breves.
Carlos III, de 76 años, ha mostrado una entereza admirable, pero los tratamientos no están dando los resultados esperados. El equipo médico que lo atiende reconoce que el avance de la enfermedad es más agresivo de lo que se pensó al principio. Su entorno más cercano habla de un hombre cansado, consciente de su realidad y con el deseo de dejar todo en orden antes de que llegue el momento inevitable.

Preparativos para una transición histórica
Ante esta situación, Guillermo de Gales ha asumido un papel clave dentro de la Casa Real. El heredero ya habría comunicado a su familia que los médicos prevén que la sucesión podría producirse en 2026. Aunque no se trata de una fecha oficial, Buckingham ha comenzado a planificar una transición tranquila.
Fuentes cercanas aseguran que el Príncipe de Gales está recibiendo asesoramiento directo sobre los protocolos de sucesión. También se habla de un refuerzo del papel de Kate Middleton, que se prepara para convertirse en Reina consorte. Ambos están volcados en proteger a sus hijos y en mantener la estabilidad de la institución.
La situación de Carlos III ha unido aún más al clan Windsor, pero también ha reabierto viejas heridas dentro de la familia. En medio de la preocupación, el foco está puesto en el futuro. El país se prepara para una nueva etapa que llegará antes de lo esperado. Guillermo sabe que su destino está cada vez más cerca. Lo afronta con serenidad, pero también con el peso emocional de un hijo que ve a su padre luchar hasta el final.