Iñaki Urdangarin, la vida de color de rosa con Ainhoa Armentia empieza a no ser tan de color de rosa
El pasado de Iñaki Urdangarin ha hecho mella en la vida de pareja

Desde que fueron vistos paseando juntos por las playas de Bidart, parece que Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia han estado viviendo una especie de idilio amoroso. Ambos han pasado más de dos años absolutamente enamorados el uno del otro y disfrutando de una vida llena de lujos gracias a los pagos constantes y contundentes que llegan por parte de los Borbón, los cuales han convertido a Iñaki y a Ainhoa en una pareja llena de dinero, pero que, sin embargo, no es tan feliz como se imaginaba.
Y es que, tal y como revelan fuentes cercanas a Ainhoa Armentia, no acaba de confiar plenamente en el que podría acabar siendo su marido. La abogada considera que no es especialmente ético vivir solamente del dinero que les pagan los Borbón. No ve una fuente de dinero fiable y detesta depender de alguien que odia.
Ainhoa comienza a dudar de Iñaki Urdangarin
Además, a pesar de que hasta ahora solamente le ha demostrado fidelidad absoluta, Ainhoa Armentia tiene serias dudas sobre si Iñaki está siendo un hombre fiel de verdad o se trata de una máscara que, en algún momento se le acabará cayendo. Y es que con la infanta Cristina, ya se diagnosticó a Urdangarin como un infiel crónico.
Esta situación, sumada a la cada vez más distante relación entre Iñaki Urdangarin y los hijos de Ainhoa Armentia, que evitan verse con su padrastro, ha hecho que esa felicidad y galería que se respiraba en esa relación haya acabado desapareciendo, para dar paso a unos tiempos llenos de dudas y con algún que otro reproche de un lado hacia el otro.
La infanta Cristina logra su cometido
Con esta delicada situación en la que se encuentran Iñaki y Ainhoa, la que ha acabado ganado es la infanta Cristina, que mediante sus malas artes ha sido capaz de hacer que su exmarido y su actual pareja comiencen a distanciarse y a tener una vida mucho menos idílica de lo que parecía que lo iba a ser. Eso sí, cabe destacar que no hay ninguna pareja en el mundo que no tenga algún que otro altibajo, por lo que, difícilmente esto va a conllevar una separación. Al menos por ahora.