Iñaki Urdangarin y su hija, Irene, empezaron mal el verano con la discusión más dura en lo que va de año
Las actitudes de Irene Urdangarin han hartado a Iñaki
Irene Urdangarin ha puesto punto y final a uno de los años más delicados y difíciles de su vida. La hija menor de los Duques de Palma no ha sido capaz de sacar adelante su primer año en la Universidad de Oxford y no está pasando por su mejor momento. Ha comenzado a entender que ha perdido el tiempo y que, por su falta de miras, ha desperdiciado un año de su vida, faltando gravemente al respeto a su abuelo, que ha puesto más de 40.000 euros para que acabe tirando su primer año de carrera.
Ante esta situación, Iñaki Urdangarin consideró que era una buena idea viajar hasta Londres para pasar unos días con su hija y acompañarla en unos días que sabe que están siendo complicados para ella. Sin embargo, lo que el exduque de Palma no se esperaba era que ese viaje para sorprender y darle una alegría a su hija iba a acabar de la peor forma posible y con un enfrentamiento de difícil solución entre padre e hija.
Irene volvió a arremeter contra Ainhoa Armentia
Como ya no es ninguna sorpresa, Iñaki Urdangarin está decidido a formar un núcleo familiar fuerte con sus hijos y Ainhoa Armentia. Es por este motivo que trata de hacer que su pareja esté presente en todas las reuniones que Iñaki hace con sus hijos. Sin embargo, Irene es muy intransigente con su madrastra y se lo volvió a demostrar en esta última visita de Iñaki a Londres, donde las formas de Irene volvieron a dejar mucho que desear y dañaron seriamente su relación con su padre.
Y es que, tal y como hemos podido saber, cuando Irene vio que su padre no la visitaba por su cuenta, optó por cerrar la puerta de casa y exigir a Ainhoa Armentia que se fuera, ya que no iba a permitir que pisara la casa en la que vive. Algo que llevó al límite a un Iñaki Urdangarin que optó por marcharse junto a su pareja y volver a Vitoria de inmediato.
Así pues, Iñaki Urdangarin no está para estos juegos por parte de una Irene Urdangarin que, con su mal carácter, ha acabado protagonizando la peor pelea con su padre en el último año.