Juan Carlos I presiona a su hijo con una mansión a una hora de Madrid

Los últimos movimientos de Juan Carlos I han desquiciado a Felipe VI

Juan Carlos I presiona a su hijo con una mansión a una hora de Madrid

A lo largo de estos últimos meses, Juan Carlos I ha estado actuando de una forma especialmente errática. El emérito se ha dedicado a buscar justicia con todos aquellos que considera que le han hecho daño o que han atentado contra su honor y su imagen. Es por este motivo que ha interpuesto demandas contra Miguel Ángel Revilla y contra Corinna Larsen, a los que considera dos de sus mayores enemigos. Sin embargo, estas medidas legales, que no han sido la mejor de las ideas, solamente han sido el principio de una serie de actuaciones realmente raras y poco esperadas por parte de Don Juan Carlos.

En este sentido, tal y como ha confirmado el medio Cierre Digital, el padre de Felipe VI ha comenzado a presionar a su hijo con el plan de mudarse para estar mucho más cerca de España. Una decisión que tomaría con la excusa de pasar los últimos años de su vida lo más cerca posible de España, algo que no le hace ninguna ilusión a Felipe VI, que solo quiere tener lo más lejos posible a su padre.

Felipe

Juan Carlos I ya ha elegido el lugar de su nueva residencia

Tal y como hemos podido saber gracias a la información de Cierre Digital, el plan de Juan Carlos I pasa por la compra de una mansión en la localidad de Cascais, en Portugal. Un pueblo costero que cuenta con una playa de lo más agradable y que apenas está a una hora en avión de Madrid o de Sanxenxo, lo que convierte a la localidad lusa en un punto ideal para tener una especie de segunda residencia.

El emérito quiere que su hijo reaccione

La realidad es que todos los movimientos de Juan Carlos I van en una misma dirección. Tanto las demandas como esta idea de mudarse son parte del plan de llamar la atención de su hijo. Juan Carlos I se siente solo y abandonado en Abu Dabi. Quiere estar en su tierra y no pasar más tiempo solo en Emiratos Árabes, donde no se siente feliz.

Así pues, si hay una razón detrás de todos estos movimientos de Juan Carlos I, es la de buscar la atención constantemente de su hijo. Un Felipe VI que está resistiendo la tentación de permitir que su padre regrese.