Juan Urdangarin ha pedido a su padre que vigile las malas compañías de Irene
El hermano mayor de Irene ve que está rodeada de gente de poca calidad
Irene Urdangarin llegó a la Universidad de Oxford con la intención de demostrar que su intento fallido de graduarse en gestión hotelera en la Universidad de Lausana fue solamente un accidente. Sin embargo, en la primera mitad de curso en Inglaterra, hay cierta preocupación por la evolución de la hija menor de Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina, pues, lejos de estar obteniendo unos buenos resultados académicos, Irene pasa más tiempo paseando y frecuentando locales de ocio, por Londres de noche, que en la biblioteca, la cual ha pisado en contadas ocasiones.
En este sentido, el hecho de que Miguel y Juan Urdangarin también estén residiendo en Londres ha facilitado que Irene esté controlada la gran mayoría de las horas del día. Pues, a pesar de que ella no lo ve, sus hermanos observan todos y cada uno de sus movimientos, lo que ha llevado a Juan, el mayor de los cuatro hermanos, a dar la voz de alarma, ante los malos hábitos que está adquiriendo Irene.
De hecho, según se llegó a filtrar en su momento, no es raro ver a Irene saliendo de fiesta por Londres un jueves y que no vuelva a su piso de estudiante en Oxford hasta el domingo por la noche. Algo que ha mermado sensiblemente su desempeño académico, pues las calificaciones de Irene están siendo pésimas.
Juan, preocupado por las malas compañías de Irene
La realidad es que los hermanos de Irene, especialmente Juan, están muy preocupados por las malas compañías que está comenzando a tener su hermana pequeña a su alrededor. Pues, a pesar de que nunca ha sido una estudiante brillante, la realidad es que esa faceta de salir de fiesta durante cuatro días seguidos nunca se la habían visto. Hecho que ha obligado a Juan a ponerse en contacto con su padre, Iñaki Urdangarin, para pedirle que haya un control mucho más cercano de la vida que está llevando Irene, la cual, si sigue así, irá por un muy mal camino.
Así pues, Iñaki Urdangarin ya está más que informado de la complicada situación en la que se encuentra su hija menor, Irene, quien, en su nueva vida de estudiante en Oxford, ha comenzado a acercarse a personas de poca calidad que, lejos de llevarla a ser una mejor persona y estudiante, la están llevando por el camino de la mala vida.