La escolta de Zarzuela rescata a la infanta Elena en circunstancias indecorosas

La infanta Elena organiza fiestas hasta altas horas de la madrugada

La escolta de Zarzuela rescata a la infanta Elena en circunstancias indecorosas

A pesar de que de puertas hacia afuera, la infanta Elena siempre ha parecido la hija más seria y menos social de Juan Carlos I, lo que la conocen más de cerca aseguran que, en confianza, es una mujer que poco tiene que ver con la que se ve en público. En este sentido, el hecho de que no se le conozca una nueva pareja después de su divorcio con Jaime de Marichalar sirvió para hacer más grande la leyenda de que Elena era una mujer aburrida y muy seria. Algo que, tanto sus amigos, como el personal de seguridad sabe que no es verdad.

En este sentido, al igual que sus hijos, Froilán y Victoria Federica, a la infanta Elena le gusta mucho la fiesta. La hija mayor de Juan Carlos I es consciente de que, a pesar de sus 61 años sigue en forma y tiene el derecho de seguir disfrutando de la vida, como el que más. Una decisión que le ha costado más de un disgusto al personal de seguridad de Zarzuela.

Elena

La realidad es que, a pesar de festejar poco, cuando lo hace, lo hace de verdad. Hecho que provoca que a veces Elena pierda el control y tenga que ser rescatada por su equipo de escolta. Pues, por norma general, cuando celebra una fiesta o algún acontecimiento con los suyos, acaba bebiendo más de la cuenta, a altas horas de la madrugada y, generalmente, necesita ayuda de sus escoltas para mantenerse en pie.

Los karaokes y salones de baile, la perdición de Elena

Nunca ha pasado desapercibido el gusto de la infanta Elena por las artes escénicas. La hija mayor de Juan Carlos I siempre disfrutó de cantar y bailar y de acudir a clases de estas artes. Una afición que la infanta Elena ha trasladado a su vida nocturna y social. Pues, no son pocas, las ocasiones en las que acude, junto a sus personas más cercanas, a salas de karaoke y de baile en plena Gran Vía, pasa pasar la velada, entre risas y, en ocasiones, demasiado alcohol.

Es en este tipo de celebraciones, en las que Elena acaba más perjudicada. Pues, acostumbra a beber más de la cuenta y acaba perdiendo el control. Lo que obliga, por lo general, a que el equipo de escolta de Zarzuela tenga que intervenir y acaben rescatando a Elena en unas circunstancias, como mínimo indecorosas y bochornosas.