La infanta Cristina puso a Iñaki Urdangarin de patitas en la calle dos años antes de Ainhoa Armentia
La relación entre Iñaki y Cristina estaba rota antes de la llegada de Ainhoa

El 25 de enero del año 2022, apareció en la revista Lecturas una de esas portadas que se recuerdan para siempre. Una fotografía en la que se podía apreciar perfectamente como Iñaki Urdangarin paseaba por la costa de Bidart de forma muy cariñosa con una mujer rubia cuyo rostro poco o nada tenía que ver con la infanta Cristina. Una mujer cuya identidad poco tiempo después trascendió y pudimos saber que se trataba de Ainhoa Armentia. Lo que demostró que Iñaki estaba siendo infiel a su esposa de forma escandalosa.
Muchos consideran que fue a raíz de esta relación extramatrimonial que comenzó todo el largo y duro proceso de divorcio entre Iñaki Urdangarin. Una separación en la que el que fuera Duque de Palma fue capaz de sacar de sus casillas a todos los miembros de la familia Borbón. Pues, lejos de cumplir su palabra, Juan Carlos I acabó aceptando que se iba a pagar una buena suma de dinero a Iñaki Urdangarin a cambio de su silencio.
Sin embargo, la realidad es que ese divorcio, que se acabó de formalizar a raíz de las fotografías de Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia paseando por Bidart, ya se estaba fraguando desde hacía dos años. De hecho, Pilar Eyre así lo llegó a advertir en uno de sus archiconocidos blogs. Sin embargo, desde Casa Real lo desmintieron.
Cristina ya se había hartado de Iñaki en 2020
La realidad es que fue mientras Urdangarin seguía cumpliendo condena en la prisión de Brieva, que la infanta Cristina habría comenzado a consultar a abogados especialistas en divorcios cuál era la mejor forma de llevar a cabo su proceso. Una información que reveló Pilar Eyre y que cobra todo el sentido del mundo. Pues, como hemos podido saber, en prisión, la relación entre los Duques de Palma se comenzó a resquebrajar por culpa del fuerte rencor que sentía Iñaki por todos los Borbón, incluyendo a su esposa.
Así pues, la realidad es que Ainhoa Armentia solamente aceleró el proceso de divorcio de Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina. Pues, durante el paso de Iñaki por la cárcel las cosas ya empezaron a torcerse de forma irremediable.