La infanta Elena está hundida por el verdadero estado de salud de su padre
La calidad de vida de Juan Carlos I está bajo mínimos
Hace tiempo que sabemos que el estado de salud de Juan Carlos I es malo. No responde a ningún tratamiento y, más allá de todos los problemas físicos, el emérito también ha comenzado a tener problemas propios de la edad. Su estado de ánimo ha caído en picado y los que más cerca están de él, aseguran que está mostrando los primeros síntomas de demencia senil. Una situación absolutamente dramática que ha dejado muy tocada a la infanta Elena, que ha visto como su padre ha ido empeorando día tras día y sin que haya ninguna solución a su alcance.
La realidad es que la infanta Elena siempre ha sido la más Borbón de sus hermanos. Es la hija más cercana a Juan Carlos I y la que más cerca ha estado del emérito, desde que se exilió en Abu Dabi. Además, ha actuado como su representante a la hora de hablar con Felipe VI y pedirle que permita su regreso a España. Algo que siempre se le ha negado.
Juan Carlos I ha dejado de ser el de siempre
Si hay algo que siempre ha caracterizado a Juan Carlos I ha sido su personalidad. El que fuera Rey de España era un hombre especialmente avispado y de mente rápida. Tenía gran facilidad para entender lo que sucedía a su alrededor y para actuar en consecuencia. Una serie de capacidades que, hoy en día ya no forman parte del emérito, que ha perdido la gran parte de sus cualidades cognitivas.
Según hemos podido saber, a sus 87 años, Don Juan Carlos ha comenzado a perder muchas facultades. Está dejando de ser el de siempre. De hecho, cuentan que a veces no llega ni a reconocer a algunos de sus amigos. Mostrando claramente un empeoramiento nivel cognitivo que está afectando a su calidad de vida. Pues, además de no poder moverse, ahora es la cabeza la que tampoco le responde. Provocando así, una situación verdaderamente dramática.
Así pues, dada la delicada situación en la que se encuentra Juan Carlos I, la infanta Elena está absolutamente devastada y hundida. Y es que no puede ver como su padre se va apagando poco a poco sin que ella pueda hacer nada al respecto.