La infanta Elena sufrió en primera persona las consecuencias de la adicción al alcohol
El alcohol ha hecho mucho daño a Juan Carlos I y a sus seres queridos

En la vida de Juan Carlos I nunca faltaron lujos, excesos ni vicios. Durante décadas, el que fuera Rey de España disfrutó de todo tipo de caprichos, siempre con la protección de su posición y sin miedo a las críticas. Pero, entre todos esos vicios, el alcohol fue uno de los que más marcó su trayectoria, dejando episodios que no solo avergonzaron al emérito, sino que afectaron directamente a su familia, especialmente a su hija, la infanta Elena.
Según cuenta Pilar Eyre, Juan Carlos I tuvo graves problemas con el alcohol durante buena parte de su vida, hasta el punto de ser calificado por su entorno como una persona con serios problemas de adicción y de alcoholismo. Uno de los momentos más bochornosos se produjo durante su famoso viaje a Botsuana, donde, después de pasar toda la noche bebiendo, sufrió una aparatosa caída que derivó en una hemorragia interna. A pesar de ello, el emérito insistía en seguir bebiendo vino, demostrando su dependencia y la dificultad para frenar su consumo.
Una escena que marcó a la infanta Elena
Sin embargo, el episodio que marcó de verdad a la familia ocurrió mucho antes. La infanta Elena, con apenas 15 años, vivió una escena que no olvidaría jamás: encontró a su padre tirado en el suelo, rodeado de vómito y sin poder levantarse tras una noche entera de copas. Fue un golpe durísimo para la hija mayor de Juan Carlos, que se enfrentó a la cruda realidad de ver a su padre completamente superado por el alcohol.
Además, como no podía ser de otra forma, ha sido Elena quien se ha acabado encargando de cuidar a su padre y de evitar que siga bebiendo alcohol en exceso a su avanzada edad, lo que supondría un grave factor de riesgo para su vida, teniendo en cuenta que ya tiene 87 años y está muy delicado de salud.
Así pues, al fin y al cabo, ha acabado siendo la infanta Elena la que ha pagado las consecuencias de los problemas de Juan Carlos I con el alcohol. Fue ella quien tuvo que ver, con apenas 15 años, esa imagen tan bochornosa y quien ahora lo ha tenido que acabar cuidando y controlando.