La infanta Sofía trabajará en verano después de dos años negando propuestas
Un verano distinto marcará el inicio de una nueva etapa para la infanta Sofía
La infanta Sofía empieza a escribir su propio camino. Después de finalizar el Bachillerato Internacional en el UWC Atlantic College de Gales, con 18 años recién cumplidos, se prepara para una etapa muy distinta: más activa, más visible y con una agenda propia.
Hasta ahora, su presencia pública había sido discreta. En los dos últimos años rechazó varias propuestas de trabajo o colaboraciones, prefiriendo centrarse en sus estudios. Solo participó en un acto en solitario el pasado diciembre. Nada más. Sin embargo, el panorama ha cambiado.
Este verano marcará un antes y un después. La hija menor de los Reyes ha decidido aceptar compromisos oficiales. Tendrá actos propios y se espera que su presencia sea más habitual en la agenda de la Casa Real. El cambio es claro: Sofía quiere asumir un rol más protagonista y empezar a formar parte activa de la institución.
Carné de conducir y primeras responsabilidades
Además de su actividad institucional, la infanta también dará pasos importantes en el terreno personal. Una de sus prioridades inmediatas es sacarse el carné de conducir, algo habitual en la mayoría de jóvenes que alcanzan la mayoría de edad. Otro símbolo más de que entra en la vida adulta.

En paralelo, Sofía medita su futuro académico. Aunque aún no ha confirmado si estudiará en España o en el extranjero, se sabe que no seguirá la formación militar como su hermana, la princesa Leonor. Sus estudios en Gales, enfocados en relaciones internacionales y política, le abren muchas puertas. Quizá una universidad pública española, como las que escogieron sus padres, o tal vez un año sabático vinculado a voluntariado.
Sea cual sea su elección académica, lo cierto es que este verano será clave. Veremos a una Sofía distinta: más presente, más cercana y más involucrada. Ya no es la adolescente reservada de los últimos años. Ahora, como adulta, se prepara para ocupar un espacio propio dentro de la familia real. El tiempo de estar en segundo plano ha terminado.